Barça, objetivo Lisboa

El Barça se mide hoy (21.00. Movistar) al Nápoles en un Camp Nou vacío para jugar, cinco meses después de lo previsto, la vuelta de octavos de la Liga de Campeones, en la que defiende el 1-1 de la ida para acceder a la fase final de Lisboa. Quique Setién, técnico de los azulgranas, incidió ayer en la autocrítica que ha hecho el equipo, que hoy no puede fallar si quiere salvar la temporada. “No me ha pasado por la cabeza en ningún momento la posibilidad de que este sea mi último partido. Estoy tranquilo. Hemos preparado el partido a conciencia, pensando que vamos a continuar y que vamos a afrontar el resto de duelos hasta el final con la misma energía que tenemos”, dijo. “Necesitábamos un descanso después de tantos partidos seguidos y hemos vuelto con energías renovadas. El equipo ha hecho muy buenos entrenamientos y hemos podido preparar el encuentro”, añadió.

Sobre el once, el técnico no dio muchas pistas, pero las bajas de Busquets y Arturo Vidal aclaran al menos un centro del campo en el que vuelve De Jong y donde puede estar Sergi Roberto. “La alineación está bastante decidida. Es verdad que la posición de algunos jugadores puede variar”, dijo. “En un partido así no se necesita motivación. Estamos hablando que tenemos jugadores que han estado en esta situación en decenas y centenares de ocasiones. Estamos hablando de los mejores jugadores del mundo. Nuestra delantera es de ensueño. Hay que esperar que sea la mejor versión de todos ellos en un partido importante”, incidió.

“Está bastante decidido, aunque la posición de algunos jugadores puede variar”, admitio Setién

Sobre el Nápoles dijo que “es un rival que tiene muchos registros, pero es uno de los equipos con más posesión de balón en Italia. Nos pueden hacer daño si tienen el balón. Trataremos de minimizar sus puntos fuertes y ser protagonistas”, añadió.