FÚTBOL PRIMERA DIVISIÓN
Bartomeu contraataca
El Barça denuncia la falsificación de firmas ante la Guardia Civil para frenar la moción de censura || “Nuestro método ha sido manual, casi rupestre, estamos tranquilos”, aseguran sus impulsores
La directiva del FC Barcelona, a través de los servicios jurídicos del club, presentó el martes una denuncia por una presunta falsificación de firmas en la comandancia de la Guardia Civil de Barcelona para frenar la moción de censura. Los directivos del club que forman parte de la Mesa del voto de censura, Marta Plana y Jordi Argemí, habrían encontrado firmas que corresponden a carnets de socio que habían sido denunciados cuando se denunció el caso de 2.800 abonos falsos para el Camp Nou que se utilizaron para la reventa de entradas. Los directivos trataron ayer de frenar el voto de censura, pero la votación de la mesa fue de 3-2 en contra, según la Cadena Ser.
El club señala que hay sospechas de que “se hayan presentado hasta 300 papeletas cuya autenticidad se pone en duda”, lo que, a su juicio, “hace pensar que puede haber otros bloques de papeletas no auténticas”, según la denuncia, lo que podría suponer delitos de falsedad en documento y usurpación de identidad. La junta apunta que “no puede descartarse que los delitos hayan sido perpetrados bajo la cobertura de una organización o grupo criminal”.
La Mesa descartó ayer paralizar el proceso por 3 votos contra los 2 de los directivos de la entidad
La moción de censura sigue adelante, pues la Mesa confirmó ayer que hay 19.380 firmas válidas, con solo 219 dudosas. Los portavoces de la plataforma ‘Més que una Moció’ aseguraron que “nos coge absolutamente por sorpresa, pero esto roza el ridículo. Es el ultimo recurso que les queda, y parece que intentan alargar la agonía”, lamentó su portavoz, Marc Duch. “Hemos hecho un trabajo manual, casi rupestre. Si el problema son 300 firmas, es que nos sobran. Me duele que su manera de defenderse sea atacar, decir que se han comprado votos o falsificado. Me duele, pero es una más. Quizá no tienen ganas de marcharse y nos preguntamos el por qué”, añadió Duch.