Camp Nou vacío ante Ferencvaros y Madrid

El Barça no podrá abrir todavía el Camp Nou y tendrá que jugar el partido de Champions contra el Ferencváros a puerta cerrada. Aunque el club había elaborado un protocolo para permitir que volviera una parte de la afición al estadio, tan sólo un 1% el primer día, la Generalitat ve “imposible” autorizarlo debido a la situación actual, que ha obligado a cerras bares y restaurantes y restringir los eventos culturales. Así lo aseguró ayer la Consellera de Salud, Alba Vergés, en una entrevista a Catalunya Ràdio.

Fuentes del club aseguran que todavía no han recibido la comunicación oficial de parte del Procicat, pero ya dan por hecho que no podrán abrir todavía las puertas a los aficionados la próxima semana, cuando está el debut europeo contra el Ferencváros, el martes 20, ni tampoco en el clásico del 24 de octubre. “Con la situación actual es muy difícil que nos podamos plantear que haya público en los estadios. No podemos adelantarnos, lo iremos valorando. Pero ahora, para un primer partido, no”, justificaba Vergés. La propuesta del Barça era permitir la entrada de 1.000 aficionados ante el Ferencváros, 10.000 en el siguiente contra el Dinamo de Kiev y llegar a los 25.000 contra el Juventus.

Por otra parte, el vicepresidente económico, Jordi Moix, desmintió ayer que la entidad azulgrana necesite “una financiación especial” para pagar las nóminas y que el préstamo obtenido por parte del banco de inversiones Goldman Sachs sea para este objeto.