FÚTBOL PRIMERA DIVISIÓN
Bartomeu se aferra al cargo
El presidente no dimite y deja el voto de censura en manos del Procicat || “No hay motivos para dimitir y sería una mala elección dejar las decisiones en manos de una junta gestora”, aseguró
Josep Maria Bartomeu siguirá al frente del Barça. A pesar de la voluntad de varios directivos de presentar la dimisión, la decisión final de la junta fue “unánime”, según dijo el propio presidente, de continuar en el cargo. El motivo de esta continuidad tiene que ver con la celebración del voto de censura que, de momento, ha quedado aplazado. El club está a la espera de recibir una notificación oficial de la Generalitat sobre la viabilidad o no de celebrar la votación antes de tomar ninguna decisión drástica. La respuesta del Procicat se espera que llegue en las últimas horas.
Así lo confirmó tras la reunión ayer de la junta el propio Bartomeu, que sentenció que no ha pensado en dimitir, “ni cuando Messi se quería ir ni ahora”, dijo en la rueda de prensa telemática posterior. “No hay motivos para dimitir y sería una mala elección dejar las decisiones que se deben tomar en estos momentos en manos de una junta gestora”, añadió en este sentido. Sobre la moción, que tendría que celebrarse entre los días 1 y 2 de noviembre, según los estatutos, Bartomeu dijo que “esta junta directiva está perpleja ante las decisiones contradictorias del Govern. Salvaguardar la salud de las personas es incompatible con estrategias partidistas”, insistió.
“Había una fecha límite para que anunciara si seguía o no. No lo hizo y aquí está”, dijo Bartomeu
También habló sobre la situación de hace unos meses con Leo Messi y su voluntad de salir del club. “La prioridad era que Messi estuviera en el nuevo proyecto y decidí no afrontar una discusión dialéctica. Se me acusó de forzar su adiós para salvar las cuentas. Pues no, pusimos por delante los intereses del club y no queríamos reforzar a un rival directo. Tomamos una decisión aceptando el desgaste”, dijo Bartomeu, que entendió la reacción del argentino tras la debacle contra el Bayern de Múnich. “Entiendo las posturas de todo el mundo, empatizar es importante. En el caso de Leo es bueno cabrearse porque no es bueno aceptar derrotas y todos nos hemos cabreado. Pero había una fecha límite para que anunciara si seguía o no de forma unilateral. No lo hizo y aquí está. Todos queremos que se retire en el Barça”, aseveró.