El Pardinyes se queda sin gasolina

Cuarta derrota seguida de un Pardinyes que ayer volvió a sufrir debido a las bajas y cayó ante el Tarragona (64-65) en un final de infarto. Las ausencias de Miller, en EEUU con coronavirus, y de los lesionados Rubín de Celis y Rogers, fueron demasiado pesadas para un equipo que pudo tener un último tiro para ganar. Pero la pizarra no funcionó y los visitantes recuperaron el balón en el último segundo para ganar su segundo duelo de la temporada.

El partido tuvo un primer acto nada atractivo, con muchos nervios y escaso acierto, dejando un 8-12 en el marcador. Fue en el segundo cuarto cuando el balón comenzó a encontrar el aro y los leridanos a pelear ante un Tarragona defensivo y físico. A medida que se acercaba el descanso, el conjunto de Gerard Encuentra iba encontrándose más cómodo y pasó a dominar (25-21). Sin embargo, el rival, dirigido por Berni Álvarez, volvió a meterse en el partido y se llegó al descanso con un ajustado 29-30 en el luminoso.

El Pardinyes llegó a tener una máxima diferencia de 11 puntos (52-41) durante el tercer cuarto del partido

La igualdad siguió siendo la tónica en el tercer acto, con el Pardinyes sin poder despegar en el marcador hasta los minutos finales, cuando alcanzó una máxima renta de 11 puntos (52-41). Los visitantes pudieron rebajarla hasta los 8 puntos antes de entrar en un último cuarto en el que los leridanos fueron a menos. Los tarraconenses fueron ganando terreno y empataron a falta de 4 minutos (56-56). El Pardinyes mantuvo la calma y entró en el último minuto por delante (62-60). Zanca firmó la remontada visitante y con el 64-65 los leridanos tuvieron una última posesión. Pero el balón de fondo no llegó a su receptor.