Un sistema cuestionado

Los jugadores del Barcelona no se encuentran cómodos con el sistema que quiere imponer en el equipo Ronald Koeman y, dentro del vestuario, crecen las críticas hacia el técnico holandés, según aseguraba ayer el diario Sport citando fuentes de la propia plantilla, que se encuentra más cómoda con el 4-3-3 clásico con el que ha jugado el Barça habitualmente.

Desde que el equipo debutó ante el Villarreal con un triunfo por 4-0, ha logrado 9 victorias, con algún buen partido como ante Osasuna, pero suma 6 derrotas que le han alejado del liderato o que, como la del martes ante el Juventus, le obligan a infrentarse el lunes a un sorteo muy complicado en la Champions al pasar como segundo. Además, ha fallado en partidos clave como ant el Real Madrid y el Atlético.

Según la información de Sport, la plantilla no tiene queja del trato de Koeman, pero las críticas se están focalizando en el sistema de juego. Tras la debacle ante la Juve, Griezmann y Ter Stegen cargaron contra la actitud de los jugadores, pero también señalando errores individuales y la forma de defender.

En este sentido, es evidente que hay mucho espacio entre líneas, hay un desequilibrio que no permite ni atacar ni defender bien y el rendimiento individual ha caido en picado.