El Llista sigue atascado

El Llista sigue sin levantar cabeza y ayer encajó en la pista del Girona la tercera derrota en cuatro partidos (3-1), lo que supone la cuarta jornada sin conocer la victoria. El equipo de Albert Folguera, que solo ha sumado uno de los doce últimos puntos posibles, entró frío al partido, fue de menos a más pero le costó crear peligro ante un rival muy físico y que se sintió cómodo, más cuando tomó rentas de dos goles.

Las primeras ocasiones fueron locales y el primero en poner a prueba a Martí Serra fue Àlex Grau, protagonista negativo del partido de la primera vuelta en Bell-lloc con su alineación indebida, que acabó con la concesión de los tres puntos en juego al Llista después de la impugnación presentada por los leridanos. Esa circunstancia añadía más motivación si cabe a los gerundenses, que a los siete minutos rompieron la igualada. Un disparo lejano de Palacín lo desviaba sutilmente David Gelmà para sorprender al meta listado.

El tanto dejó un poco tocado al Llista, que tardó en reaccionar. De hecho, no lo hizo hasta que se vio dos goles por debajo después de que en el minuto 15 Gelmà repitiera. El jugador del Girona recibió un pase de Mendes y tras tocar la bola con el stik entró en la portería de Martí Serra con algo de fortuna. Tocaba remar a contracorriente de nuevo y los listados empezaron a llegar con más insistencia, aunque sin demasiado peligro. Tuvo que ser en una gran jugada personal de Bruno Di Benedetto que el Llista logró recortar diferencias. El francés, tras deshacerse con gran clase de hasta tres defensores, batió por alto al veterano Jaume Llaverola, que hasta entonces poco trabaja había tenido. De ahí hasta el descanso poco que mencionar, más allá de una discusión entre Di Benedetto y el angoleño Humberto Mendes que acabó con una tarjeta azul para cada uno.

A la vuelta de los vestuarios el partido volvió a ponerse cuesta arriba para los listados, que encajaron el tercero, obra de Gurri, a los pocos segundos de la reanudación. El tanto hizo mucho daño y añadió más presión a un Llista que jugó precipitado y sin crear demasiado peligro ante Llaverola. La mejor ocasión llegó a bola parada gracias a una azul de Mendes, la segunda del partido, pero Vives se topó con el veterano portero local. A un minuto para el final, los colegiados anularon un gol a Di Benedetto por falta previa, y el Girona tiró de oficio para asegurar la victoria.