El Barça necesita la prórroga para pasar a semifinales

Con mucho sufrimiento y después de una prórroga tras estar casi todo el partido contra las cuerdas, el Barça acabó sacando su billete para semifinales de la Copa del Rey al apagar, gracias a la mejor versión de Corey Higgins, la rebelión de un excelso Unicaja que lo arrolló en el primer cuarto (15-29) y llegó a estar veinte arriba guiado por Dario Brizuela, autor de 33 puntos (103-93).

Se enfrentaban dos plantillas con rachas diametralmente opuestas. Los azulgranas llegaban en un gran momento de juego y resultados, con once triunfos en doce partidos en 2021, mientras que los andaluces encadenaban una serie de trece derrotas y una sola victoria, hasta que el domingo venció al Fuenlabrada en la Liga.

Pero nada de eso se reflejó ayer en la pista. El primer cuarto fue un monólogo del Unicaja. Salió a morder y arrolló al Barça en sus mejores momentos de la temporada. Todo le salía a un equipo crecido al ritmo que marcaba un imperial Brizuela.

Inició entonces el Barcelona una larga y lenta remontada. Poco a poco se fue acercando en el marcador y, tras ponerse por delante ya en el último cuarto, vio como los andaluces forzaban la prórroga tras fallar un último tiro libre Mirotic. En el añadido el Barça ya no dio opción a su rival. Hoy se medirá con el Baskonia (19.00), mientras que el Madrid-Tenerife se jugará a las 16.00.

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El Baskonia se clasificó para las semifinales tras derrotar al Joventut por 96-87, en un partido que los aleveses dominaron de principio a fin. En la primera parte ya ganaban 55-47.