LOS DETALLES
Mbappé abusa del Barça
Un 'hat trick' del francés en su estreno en el Camp Nou liquida las opciones azulgranas de estar en cuartos || Enésima debacle en Europa, esta vez ante un PSG que pasó por encima de un equipo sin carácter
El Barça volvió a darse de bruces en Europa después de caer vapuleado por 1-4 frente al Paris Saint-Germain, que vengó así la afrenta de hace cuatro años, cuando cayó por 6-1 en la mayor remontada de la historia de los azulgranas, que ayer fueron un mero espejismo de aquel equipo. Con este resultado, los de Ronald Koeman dicen prácticamente adiós a sus opciones de estar en cuartos, que pasan por otra gesta como la de 2017, tras otra noche europea aciaga en la que brilló un estelar Kylian Mbappé, que en su primer partido en el Camp Nou marcó un hat trick para doctorarse ante Leo Messi.
Con Piqué como jefe de la defensa, tres meses después de lastimarse los ligamentos de su rodilla derecha, y sin los lesionados Neymar ni Di María en el otro bando, el duelo no despertó hasta que apareció Messi, aunque Mbappé tardaría muy poco en invertir la tendencia.El astro argentino puso un balón para De Jong a la espalda de la defensa parisina y Kurzawa trabó involuntariamente al centrocampista holandés dentro del área.
El árbitro pitó penalti, y el propio Messi lo transformaba a los 27 minutos.El ‘10’, que lleva cuatro goles en esta Champions, todos ellos de pena máxima, volvía a aparecer en la jugada siguiente para infiltrarse entre la zaga gala y regalar un gol cantado a Dembélé, pero el francés remataba sin atino ni convicción solo ante Keylor Navas, que en el arranque de partido ya salvó un gol en un remate cercano de Griezmann.
El Barça no tuvo recursos para revertir la situación y en la segunda parte fue superado en todo
Pero Mbappé, que jugaba su primer partido en el Camp Nou, no estaba dispuesto a aceptar que Messi asumiera el protagonismo del choque. El francés ya había puesto en jaque a la zaga azulgrana en un par de internadas previas, pero esta vez, su intervención sería decisiva. Control dentro del área a pase de Verrati, recorte sobre Lenglet y un violento latigazo al fondo de la red que dejaba a Ter Stegen sin tiempo de reacción. El 1-1 llegaba cinco minutos después del tanto del Barça.
Con Mbappé desatado llegaron los mejores minutos del PSG en el primer tiempo. El francés asistía a Kurzawa y este disparaba cruzado para lucimiento de Ter Stegen. El meta alemán también enviaba a córner un disparo de Moise Kean, mientras el Barça, dominado por su rival, buscaba su suerte a la contra. En una de ellas, Griezmann estaba a punto a de hacer el segundo, pero su balón salía rozando el palo izquierdo de la portería de Navas tras una larga galopada. Y en la otra área, Icardi cerraba el primer acto cabeceando ligeramente desviado un saque de esquina.
La cosa no mejoró para el equipo de Koeman en la reanudación. Mbappé lo probó nada más empezar desde la frontal y, poco después, volvía a sembrar el pánico en una jugada que acababa con un tiro de Moise Kean repelido nuevamente por Ter Stegen.
En el 65, el punta francés remataba a placer para hacer el segundo, después de una centro de Florenzi que pilló en falso al portero azulgrana y que Piqué no acertó a despejar.Y pudo hacer el tercero en la jugada siguiente, al romper, con otro cambio de ritmo, por enésima vez a Dest, al que Koeman sustituiría poco después para acabar con su suplicio.
Pero el parisino estrellaba su disparo contra Ter Stegen, un minuto antes de que Kean ganara la espalda a la defensa azulgrana y cabeceara solo en el segundo palo para hacer el tercero..
Quedaban veinte minutos y el Barça, huérfano de balón y amedrentado por la contundencia ofensiva de su rival, se desangraba. Sin el abrigo del público, y con un Messi cada vez más cabizbajo, fue incapaz de reaccionar.
Ni con una acción individual de Dembélé, que tiró desviado, ni con un regalo de Navas que casi provoca que Griezmann marcara de rebote. Tampoco con el triple cambio a la desesperada de Koeman, que daba entrada a Trincao, Pjanic y Riqui Puig, por Pedri, Sergio Busquets y Piqué.
Al contrario, desguardado atrás al estar obligado a recortar distancias, daba aún más facilidades al PSG, lo que aprovechó Mbappé para culminar una letal contra visitante con un derechazo a la escuadra a cinco minutos para el final que deja la clasificación en una utopía para los azulgranas.