Imperdonable adiós a la Liga
El Barcelona tira sus últimas opciones al título con otra decepcionante derrota, esta vez ante el Celta, tras adelantarse con un gol de Messi || El equipo solo ha ganado uno de los 5 últimos partidos
Un Barcelona triste se despidió de forma imperdonable de LaLiga, al perder por 1-2 ante un Celta que encadenó su quinta victoria. Un doblete de Santi Mina dio el triunfo en el Camp Nou a los vigueses, que remontaron el tanto inicial de Leo Messi, que pudo haber jugado su último encuentro en el feudo azulgrana, si no llega a un acuerdo para renovar y que volvió a demostrar que es el mejor activo de este equipo.
La utopía de invierno del Barcelona de conseguir el doblete de Liga y Copa, se convirtió en una posibilidad tan factible en primavera que levantó la segunda y llegó a depender de sí mismo para llevarse la primera, pero la mala racha acumulada en los últimos cinco partidos (un triunfo, dos empates y dos derrotas) lo ha hecho imposible.
La Liga ya está entre Atlético y Real Madrid, que ayer ganaron. El Barça empezó volcándose al ataque, pero sin remates claros. Tan solo Griezmann (10’), tras un pase de Messi, tuvo un cara a cara con el portero visitante, al que no pudo superar. Poco después fue el propio argentino quien remató desviado.
En el 28 Messi no desaprovechó una ‘delicatessen’ de Sergio Busquets, que le puso un balón milimétrico en la cabeza. Fue su gol número 30 en la Liga. El pequeño consuelo para Messi después de esta debacle azulgrana es que ya tiene en el bolsillo su octavo Pichichi, el quinto consecutivo. Los 30 goles que suma dejan en una quimera que Ge- rard Moreno, con 23, lo alcance en la última jornada.
La alegría del tanto de Messi le duró poco al Barcelona. En el minuto 38 un disparo fuerte desde la frontal del área en la primera llegada del Celta dejó helado a Ter Stegen, quien no pudo ver la trayectoria del balón porque se lo impidió Piqué.
El conjunto azulgrana echó de menos la verticalidad de Frenkie de Jong, sancionado, e Ilaix Moriba, su sustituto, se mostró rutinario como el resto del ataque del Barcelona. Pedri, exhausto por los minutos acumulados, fue sustituido por el infrautilizado Riqui Puig en el descanso. Los tres aspirantes a la Liga empataban en ese momento y un triunfo entonces permitía al Barcelona llegar a la última jornada con opciones.
A falta de 20 minutos, Koeman intentó dar otro aire al ataque con Trincao y Braithwaite y cinco minutos más tarde el Osasuna se adelantó en el Wanda Metropolitano, dejando en bandeja al Barcelona. Pero la impotencia azulgrana pasó de la teoría a la práctica con todo su esplendor. En el 83 Lenglet fue expulsado por doble amarilla y el Atlético remontó al Osasuna.
La conclusión del drama azulgrana y la epopeya gallega la puso Santi Mina, quien batió en el 89 a un desnortado Ter Stegen. Un penoso adiós a la Liga.
Imperdonable adiós a la Liga
