FÚTBOL LIGA DE CAMPEONES
El Chelsea niega la gloria a Pep
Un único gol del alemán Kai Havertz decantó para los londinenses una final inglesa muy intensa || La Champions se le resiste a Guardiola desde hace diez años y el City sigue sin ganarla
La partida de ajedrez, el encuentro de estrategas, la batalla de pizarras se decidió por un chispazo. Un magistral pase de Mason Mount a Kai Havertz que derrumbó las esperanzas de ser campeón de Pep Guardiola y su Manchester City y colocó la segunda Champions en las vitrinas del Chelsea (0-1).
Como si de la final de 2012 se tratara, el Chelsea volvió a emerger como no favorito para dar la sorpresa y apoyarse en el dibujo de Thomas Tuchel, la genialidad de sus jóvenes y la experiencia del capitán para conquistar la segunda Liga de Campeones y negar a Guardiola una miel que se le resiste desde hace diez años y que tendrá que seguir persiguiendo con un City primerizo e inadaptado a estos partidos.
La final, decidida por la experiencia, se quitó sus vestiduras de partida de ajedrez para dar paso a un ida y vuelta frenético, que dejaba en paños menores a las previsiones de encuentro cerrado. El City cazó a la defensa del Chelsea, aún desperezándose, con un pelotazo en largo de Ederson hacia Sterling, al que anuló Reece James en el último instante.
Pero en esta locura de inicio, inesperado, se lesionó Thiago Silva, consciente de que la fortuna le negaba otra oportunidad como el año pasado. Pese al golpe no se ahogó el Chelsea. Seguía incómodo el City, acostumbrado a dominar y no a que lo dominen, y Mount encontró la llave. El mejor jugador ‘blue’ de la temporada quebró a la defensa ‘citizen’ con un pase entre líneas que dejó solo a Havertz. El germano se fue a trompicones de Ederson y a puerta vacía avisó del jaque mate.
Dio 45 minutos a Guardiola para reaccionar. El técnico de Santpedor se había equivocado prescindiendo del mediocentro defensivo, Fernandinho o Rodri, en pos de un equipo más ofensivo.
Tenía una parte para ser el sexto equipo en remontar una final que llegaba perdiendo al descanso; el primero en ganar su primera Champions remontando desde el Oporto en 1987. Su calma, como ganador de tres ‘Orejonas’, dos como entrenador y una como jugador, contrastaba con la de su equipo. Y encima, su mejor arma en el césped, su prolongación, se fue lesionado con un ojo morado tras un choque con Rudiger.
De Bruyne, entre lágrimas, desapareció abrazado a Guardiola y Lillo. La final acabó con un remate de Mahrez rozando la escuadra en el último minuto. Pero no hubo milagro.
“Hemos llegado aquí y pocos reproches tengo”
El entrenador del Manchester City, Pep Guardiola, elogió el esfuerzo de sus futbolistas, aunque lamentó haber perdido ante un rival “muy físico” y eficaz. “Hemos llegado aquí y pocos reproches tengo. Hemos tenido grandes ocasiones, la de Sterling, la de Phil Foden... Y en la segunda hemos sido más constantes”, lamentó ante los micrófonos de Movistar+.
Por otra parte, el Villarreal se medirá al Chelsea en la final de la Supercopa, fijada en principio el 11 de agosto en el estadio Windsor Park de Belfast (Irlanda del Norte).