Séptimo y diploma

Saúl Craviotto no consiguió ampliar su cuenta de medallas olímpicas después de acabar séptimo en la prueba de K1 200 metros, con la que el palista leridano abrió su participación en Tokio 2020.

Su veteranía no le sirvió en la final, que se disputó la madrugada del miércoles al jueves y donde cedió metros de inicio, sin poder recuperarlos y soñar con un nuevo metal que añadir a sus dos oros en Pekín 2008 y Río 2016 –ambos con el K2– y la plata y el bronce de Londres 2012 y la cita en Brasil, estas sí en el explosivo K1 200 metros. Sin embargo, Craviotto tendrá una nueva oportunidad en Tokio formando parte del K4 500, que esta pasada madrugada tenía previsto disputar las eliminatorias.

En el caso de que Craviotto, Marcus Walz, Carlos Arévalo y Rodrigo Germade hayan acabado entre las dos mejores embarcaciones, entraban directamente a las semifinales previstas para esta próxima madrugada.

En esta ronda, las cuatro primeras acceden a la final, programada para las 5.37 (hora peninsular) en el Sea Forest.

Craviotto, que tuvo a muchos leridanos pegados a la televisión de madrugada, accedió a la final del K1 200 con el cuarto mejor tiempo de su semifinal (35.934 segundos) y por detrás del húngaro Sandor Totka, el italiano Manfredi Rizza y el palista coruñés Carlos Arévalo. El crono del leridano le relegó al octavo carril de la final, que recibe más oleaje. Arévalo fue tercero en su semifinal, donde fue siempre en los puestos delanteros para conseguir su acceso a la pelea por las medallas con mucha más suficiencia y con unas sensaciones que parecían más buenas que las del palista leridano.

Lleida suma dos diplomas en Tokio, después del que logró Núria Vilarruba en la competición de eslalon

Esto se confirmó en la final, donde el piragüista de Betanzos salió muy fuerte y estuvo peleando con los candidatos a saborear un metal. Sin embargo, no logró mantenerse y terminó en quinta posición, a dos décimas de la medalla de bronce (35.391). Por su parte, Craviotto no tuvo una salida nada clara y, aunque intentó recuperar terreno, tuvo que conformarse con la séptima posición y el diploma olímpico, con un tiempo de 35.568 segundos. El podio lo encabezó el húngaro Sandor Totka (35.035), que se impuso por 45 milésimas al italiano Manfredi Rizza (35.080), mientras que el tercer lugar fue para el británico Liam Heath, oro hace cinco años en Río (35.202).

La delegación española vivió una nueva jornada en el Sea Forest con amplia representación en la que ninguno de los finalistas se colgó medalla. La ceutí Isabel Contreras fue la única de las representantes estatales que no logró avanzar a la final en el K1 500 metros, donde disputó la final C, quedando tercera con un crono de 1:55.728. La pontevedresa Antía Jácome conquistó el quinto puesto en la prueba de C1 200 metros del que la gallega se mostró muy orgullosa. Mientras, Iñigo Peña y Paco Cubelos cerraron la jornada de la modalidad esprint con un sexto puesto en el K2 1.000 metros con sabor agridulce, pues estaban entre los aspirantes al podio.

“Mi preparación se centró en el K4, que es el objetivo con el que vengo” “Llevo varios días diciendo que mi objetivo es el K4, que al K1 venía a intentar meterme a la final.

La preparación se ha centrado en el K4”, manifestó el leridano después de la final, de la que salió “muy contento y ya pensando en la nueva prueba. Es verdad que, en caliente, un poco de rabia sí que me da.

Al final siempre sueñas con que puede salir la carrera de tu vida.

Pero han sido mejores que yo, lo asumo y lo acepto. Había gente con una marcha más, en la salida lo he notado”, añadió Craviotto.

El leridano manifestó que llegó a Tokio sin “la explosividad y la chispa” con la que hay que preparar este tipo de competiciones tan rápidas.

“Incluso cuando preparaba el K1 200 para estar arriba mi punto débil era la salida. Pues imagínate ahora que tampoco lo hemos preparado bien”, afirmó Craviotto tras terminar en séptima posición.

El piragüista destacó también la calidad de sus rivales.

“Hemos venido a buscar medallas y a ver si cae. No las regalan, ya se está viendo que hay gente nueva, gente con la que no se contaba y la cosa va a estar muy complicada. He conseguido ganar a uno (el letón Roberts Akmens), así que contento y ya está. Borrón y cuenta nueva y a pensar en el K4”, añadió. Carlos Arévalo coincidió con el leridano en que “la preparación se ha centrado en el K4 500, que es el objetivo con el que hemos venido”.

Sort reúne este fin de semana a los olímpicos de eslalon Sort se convierte este fin de semana en la capital de las aguas bravas, con la disputa del Campeonato de España de eslalon olímpico, que reunirá a los cuatro palistas que han participado en los Juegos de Tokio en eslalon: Núria Vilarruba, Maialen Chourraut, Ander Elosegi y David Llorente. Todos ellos recibirán un homenaje el domingo, a las 16.00. La competición comienza hoy con la disputa del Campeonato de España de Kayak Extreme. En total, en Sort reunirán a lo largo de las tres jornadas de competición con unos 260 palistas de todo el Estado.