Faltó efectividad

El Llista no pudo agrandar su ya destacado palmarés europeo (1 Copa CERS y dos Europe Cup) al perder ayer en Mollerussa la final de la Continental Cup ante el gran favorito, un Sporting de Portugal que fue más efectivos que los listados, que erraron hasta dos faltas directas y dos penaltis. El Llista salió sin complejos y en el primer ataque Jepi Selva estuvo cerca de marcar.

Una clara declaración de intenciones de un Llista que no estaba dispuesto a ser una mera comparsa. El cuadro de Paulo Freitas no fue menos y avisó de la mano del italiano Alessandro Verano, pero Martí Serra salvó el gol en dos intervenciones.

La intensidad era alta y los ataques constantes, con mayor protagonismo de un Llista que tuvo varias ocasiones seguidas, especialmente tras la entrada en pista de Bruno Di Benedetto, que reaparecía después de lesionarse hace un mes en el segundo entrenamiento de pretemporada.

Pese a no estar del todo recuperado, la salida del galo dio otro aire al equipo. A punto estuvo de marcar en un contragolpe que salvó Girao con el casco al cuarto de hora. Vives también la tuvo segundos después, pero tampoco acertó en el remate final.

El Llista dominaba y creaba peligro con cierta facilidad, pero le faltaba definición. Paulo Freitas paró el partido para reorganizar al equipo y a la vuelta llegó el primer gol al culminar Joao Almeida un contragolpe en solitario (0-1, m.17). La situación aún se pudo complicar más al señalar los colegiados un penalti contra el Llista, pero Martí Serra, soberbio durante todo el partido, detuvo el lanzamiento de Toni Pérez, que segundos después era excluido por una tarjeta azul.

El galo, inédito en la pretemporada por una lesión en una mano, volvió y fue de los mejores

La falta directa correspondiente no la aprovechó Jepi Selva, pero los listados tuvieron una segunda oportunidad al señalar penalti en la misma acción. Pero ayer el Llista volvió a estar fallón en los lanzamientos directos y Andreu Tomàs tampoco pudo batir a Girao.

El Llista, exhibiendo una gran defensa, se iba al vestuario por debajo el marcador pero con la sensación de haber sido mejor a los puntos ante todo un campeón de Europa. Pero en el segundo acto la situación fue muy diferente. El Sporting comenzó mandando ya desde el saque de centro y ahogó a los leridanos. Las ocasiones se sucedían ante la portería de un Martí Serra que volvió a ser el mejor de los suyos, evitando que el marcador fuera mayor. Bloqueó dos goles claros ante Magalhaes, pero nada pudo hacer ante una genialidad de Gonzalo Romero (0-2, m.30).

El Llista no se vino abajo y reaccionó. Vives, de fuerte disparo, obligó a lucirse a Girao, infranqueable ayer. En la otra portería, Serra volvía a sacar una mano salvadora a disparo de Souto, que un minuto después se iba al banquillo excluido. La falta directa la ejecutaba Folguera y de nuevo el meta luso le ganó la partida. El Llista tampoco aprovechó la superioridad numérica, pese a las ocasiones de Folguera y Duch.

El larguero también se alió con los leridanos para evitar el gol en una falta directa lanzada por Romero, y Vives, tres minutos después, erraba otro penalti, el segundo de la tarde.

El Sporting puso la sentencia con un tanto de Souto, que dedicaba a su abuela, fallecida el viernes. El tanto dejó un groggy a los listados, que encadenaron sendas exclusiones, primero Selva y luego Vives, pero en ninguna de las dos el cuadro luso sacó provecho gracias a Martí Serra y a los palos.

A 21 segundos para el final llegó el tanto del honor del Llista, en una falta directa que esta vez sí acertó a transformar Andreu Tomàs, situando el definitivo 1-3 que daba la segunda Continental Cup al Sporting.

Folguera: “Hemos llegado vivos al descanso pero el 0-2 nos ha matado”

Albert Folguera estaba ayer satisfecho con el rendimiento de su equipo, aunque contrariado por los errores a bola parada. “No hay nada que reprochar al equipo. Sabíamos que les podíamos sorprender si nos poníamos por delante o llegábamos a empatar o a recortar distancias, pero no hemos materializado las ocasiones. La clave ha estado en la efectividad que no hemos tenido y ellos sí. Hemos llegado vivos al descanso, pero en la segunda, el 0-2 nos ha matado. Nos ha faltado marcar un gol a bola parada, no puede ser que no metamos ninguna”, lamentó el técnico, que lanzó un mensaje de futuro. “Hemos intentado competir hasta el final, y creo que lo hemos conseguido, hemos dado la cara. Esto nos tiene que servir para el futuro, que estos jóvenes se lo acaben de creer y que vayan tomando más protagonismo”.