DEPORTES
Continúan invictos
El Llista arranca un valioso punto de la pista del Palafrugell después de levantar un 3-1 || Tenía el partido ganado a tres minutos del final con un gol de Vives, pero volvió a ceder un empate 'in extremis' en un partido vertiginoso y plagado de ocasiones
El Lleida Llista Blava parece abonado esta temporada al empate y a ceder la victoria en los minutos finales. Le ha sucedido ya en tres partidos en este arranque de Liga. Primero fue ante el Liceo, luego frente al Noia, ambos en casa, y ayer se repitió la historia en Palafrugell, aunque esta vez los de Albert Folguera tuvieron que remar a contracorriente prácticamente los 50 minutos de juego. Comenzaron mal, se vieron 3-1 abajo, lograron levantarlo en una gran segunda parte (3-4), pero acabaron cediendo dos puntos en un error a dos minutos y medio del final que deja un sabor agridulce, pese a que el punto es importante porque le mantiene invicto.
Madrugar (la expedición partió hacia tierras gerundenses a las 7.30 horas) no le sentó nada bien al Llista, que completó una primera parte falto de energía y lejos de su mejor nivel.
Un disparo de ‘Jepi’ Selva al palo a los dos minutos de juego fue, al margen del gol y alguna llegada al final, el bagaje ofensivo de los listados en el primer asalto. El Palafrugell salió muy activo y llevó la batuta del juego en todo momento, liderado por un Sergi Canet en estado de gracia.
El goleador local, que ya puso a prueba a Martí Serra al minuto de juego, rompió la igualada de un fuerte disparo que el meta leridano, muy tapado, no vio (1-0, m.8).
Previamente, el italiano ‘Caco’ Ceschin, otro de los destacados, había estrellado una bola en el larguero. La situación aún se pudo complicar más con la exclusión, un tanto rigurosa, de Cañellas, aunque por fortuna Serra desbarató el disparo de Ceschin.
Los listados también salieron indemnes de los dos minutos que jugaron en inferioridad y en el tramo final del primer cuarto intensificaron su ataque.
Vives, ‘Jepi’ Selva y Badia, este en una brillante jugada personal, avisaron antes de que el de Valls firmara el empate.El paso por los vestuarios no cambió el guión y el Palafrugell volvió a tomar la delantera con un tanto de ‘Caco’ Ceschin tras pase de Borja Ramon (2-1, m.30). El partido entró en un intercambio de golpes sin tregua.
Al minuto, Selva envió la segunda bola al palo y segundos después era Canet el que se topaba con la madera.
El partido, jugado a un ritmo trepidante y plagado de ocasiones, tuvo dos claros protagonistas: los porteros. Puigbí volvió a aparecer para evitar el tanto a disparo de Cañellas y poco después, en el 34, Martí Serra se lucía en un dos contra uno local.
El palo volvió a cruzarse en el camino del Llista, esta vez en un remate de Vives.El Palafrugell tuvo el tercer gol en una falta directa motivada por otra rigurosa exclusión de un jugador leridano, esta vez de Bruno por protestar cuando ya había sido apercibido anteriormente.
Por suerte, Martí Serra le adivinó las intenciones a Candamio y desbarató la ocasión, pero nada pudo hacer, en la jugada siguiente, ante el duro disparo de Canet que situaba un peligroso 3-1 (m.36). Puigbí volió a lucirse en un doble remate del Llista, que encontró el premio del gol en un contragolpe culminado por Andreu Tomàs (3-2).
La décima falta de los leridanos dio la opción a Ceschin de volver a situar a los suyos con dos goles de renta, pero Serra estuvo providencial.
A cinco minutos para el final, Andreu Tomàs, de un fuerte disparo desde media pista, superó a Puigbí y restableció la igualada (3-3). El Llista tuvo la oportunidad de ponerse por delante en el marcador con la décima falta del cuadro gerundense, pero Bruno Di Benedetto remató al cuerpo del portero.
El galo pudo redimirse un minuto después, pero disparó alto.El Llista estaba volcado ante la portería rival y el tanto llegó en un disparo de Vives que, tras tocar en Borja Ramon, se coló mansamente por debajo del cuerpo de Puigbí.
Los de Albert Folguera habían hecho lo más difícil, remontar, pero se volvieron a quedar a medias al encajar el empate definitivo en un despiste defensivo a dos minutos y medio del final.