LOS DETALLES
El AEM remonta en el segundo tiempo un 0-2 al invicto Espanyol
El AEM remonta en el segundo tiempo un 0-2 al invicto Espanyol, recién descendido y candidato a subir || Pixu empató con dos goles en tres minutos nada más empezar el segundo tiempo y Taberner acabó certificando el triunfo a cinco minutos para el final
Volvió la magia al Recasens. Cuando todo estaba perdido, el AEM recordó que cuarenta y cinco minutos en su estadio son muy largos y que a veces no es suficiente ver para creer lo que la fe es capaz de conseguir. En el minuto 50, las leridanas perdían por dos goles (0-2) pero le acabaron dando la vuelta al marcador.
Esto, en cualquier partido, ya de por sí sería una gran hazaña, pero es que, además, se produjo contra uno de los clubes más históricos de las categorías femeninas del fútbol –campeón de Primera y en seis ocasiones de la Copa de la Reina–, que juega en Segunda por primera vez en tres décadas y que, además, llegaba invicto a tierras leridanas. Y lo cierto es que dio buena prueba de su enorme potencial ya que en el minuto 12 ya había marcado sus dos goles. Fueron prácticamente calcados.
Ambos a partir de un córner servido por Sara desde la derecha. En el minuto 10, Xènia marcó el primero al empujar un balón que había sido repelido por el larguero tras intervención de Mireya, y, dos minutos después, nuevamente la central blanquiazul enviaba el balón a la red tras peinar el balón en el primer palo. Dos mazazos que dejaron al AEM tocado y aparentemente hundido.
El naufragio, de hecho, pudo haberse certificado en más de una ocasión de no ser por la gran actuación de Mireya, que volvía tras un mes en el dique seco y que intervino con lucidez en varias ocasiones para evitar el tercer tanto del Espanyol.Tras el descanso, el AEM se sacudió de arriba a abajo y cambió de sistema, pasando a la defensa de cuatro –con la también reaparecida Nadia– y a la línea de tres en la mediapunta, con la que pudo explotar mejor sus virtudes ofensivas. La prueba de ello fue que, en el minuto 51, pudo recortar distancias. Pixu, en una clase magistral de olfato y colocación, se interpuso en un rechace de Irene Corral en el área tras un disparo flojo de Astudillo, y sin más intervención por parte de la capitana, el balón salió despedido hacia la red.Pixu, que volvía a marcar un mes después, sabía que quedaba tiempo y margen de sobras y prácticamente no celebró el gol: cogió el balón de dentro de la portería de Myllyoja y lo plantó de nuevo en el centro para que siguiera el juego cuanto antes.
Le faltó tiempo para lograr el segundo, que llegó tres minutos después en una nueva acción que fue tan poco plástica como efectiva. Un envío en profundidad de Dulce desde la derecha lo recogió la capitana dentro del área y, tras un forcejeo con Maite y Corral, y casi sin ángulo y sobre la línea de fondo, puso el pie para lograr el tanto del empate.La locura se desató en el Recasens ante algo que parecía imposible. Se desató a la altura de lo que supone puntuar contra el Espanyol, pero especialmente por como se había puesto el escenario en el primer tiempo.
Y si el 0-2 había sido una losa para el AEM, el 2-2 fue otra todavía más pesada para el Espanyol, que acusó la presión y los nervios porque veía a un equipo leridano más vivo que nunca.El choque llegó igualado a la recta final, y entonces el AEM hizo el jaque mate: Natalia controló el balón en el círculo central y vio la incorporación al ataque de Taberner. La leridana, que había entrado al terreno de juego treinta segundos antes, recibió un medido pase de la reusense para que batiera en el mano a mano y con sangre fría a Myllyoja, certificar la remontada y dar una buena muestra de que la magia ha vuelto al Recasens para dar un triunfo al AEM que se recordará por mucho tiempo. “Cualquier victoria contra un equipo histórico como el Espanyol hubiera sido épica, pero conseguirla así lo es todavía más y hay que celebrarlo porque es un día para la historia”.
Así sintetizaba el entrenador del AEM, Òscar Cobacho, el tamaño de la proeza conseguida. “A nivel grupal es un chute de adrenalina bestial”, aseguró el técnico, que añadió que “pese a tener un equipo tan fuerte delante, remar a veces tiene premio, y era difícil pero yo creo en este equipo”. Por su parte, la bigoleadora Pixu dejó claro que en ningún caso se hubiera esperado este resultado con el marcador del descanso: “No, está claro que no, pero hemos hablado que había que seguir trabajando, hemos planteado el juego diferente y ha salido bien porque hemos creído hasta el final.
Por último, Taberner aseguró que “sabíamos que era complicado porque era un equipo muy fuerte pero se ha visto que podíamos”. El Pardinyes aún no conoce la victoria en Liga, completadas siete jornadas, y sigue colista con un punto ya que cayó ayer ante el Vic Riuprimer por 3-0. Las leridanas viajaron al encuentro con solo 12 jugadoras, dos de ellas porteras, por lo que no pudieron hacer sustituciones y el cansancio les acabó pasando factura.
El primer gol local llegó en el minuto 33, obra de Busquets, en una jugada a balón parado, como ya les ha ocurrido a las de Albert Canton en otros partidos. Pese a tener alguna opción para empatar, en el tramo final el Pardinyes tuvo un bajón y el Vic Riuprimer sentenció con un doblete de Núria Sala en cuatro minutos (3-0).
El Pardinyes cae ante el Vic Riuprimer y sigue colista