Poco premio para el Barça

El Barça arrancó un punto del Sánchez Pizjuán que supo a poco y es que el equipo azulgrana, de la mano de Xavi Hernández, ofreció muy buenas sensaciones y mostró una mejoría evidente tratando de recuperar el juego que fue en los años dorados del club su mejor emblema. Si el Barça necesitaba un punto inflexión, este pudo ser el del partido de anoche. El punto, corto para los merecimientos de los barcelonistas, sirve sobre todo para subir la autoestima del grupo que con Xavi empieza a verse que vuelve a dar señales de ser el equipo grande, que propone y domina como ha sido siempre a lo largo de la historia

Dembélé, que fue de menos a más, tuvo la mejor ocasión para desnivelar la balanza con un tiro al palo

Fue el mejor partido del Barça de Xavi.

Poco a poco se va viendo el Barça que quiere el técnico. Con Pedri y Ansu este equipo dará un paso adelante. Este es el camino.

El Barça, que sigue sin puntería y regalando puntos por esa falta de gol, jugó bien. Muy bien, por momentos. Pero sigue dando facilidades atrás, como en el córner en el que el Papu Gómez se marchó de Abde y remató un centro raso del exblaugrana Ivan Rakitic –fue sustituido con molestias– sin marca ni oposición.Justo antes del descanso empató Ronald Araújo de un potente e imparable cabezazo, también a la salida de un córner.

Previamente, los extremos Ousmane Dembélé y Abde tuvieron ocasiones para marcar, pero tuvo que ser el omnipresente central uruguayo quien igualara el tanto inicial del Papu.Con este empate, el Barça no entra en puestos de acceso a competiciones europeas y menos todavía puede alcanzar la cuarta plaza a la que optaba. Pero el Sevilla, pese a acabar dando por bueno el empate tras la expulsión de Koundé, tampoco pudo situarse a 3 puntos del liderato. El Real Madrid, sin jugar, se proclamó campeón de invierno.

El Barça tuvo el balón, lo movió con criterio en ciertos momentos, tuvo más ocasiones y sobre todo tuvo más remates a portería, también un tiro al palo de un Ousmane Dembélé que fue de menos a más, aunque todavía está lejos de su propia mejor versión. Pero no entra el balón y ese punto es cuanto menos agridulce. Hace poco tiempo se hubiese festejado como una victoria, pero por lo visto ayer supo a poco.Contra diez, el Barça movió el banquillo.

Entraron Lenglet por el lesionado Eric Garcia, que se fue con un fuerte golpe en el costado, y Nico en el lugar de un Jutglà exhausto, que abrió espacios y trabajó sin descanso para el beneficio del grupo. Los azulgrana fueron a por el partido porque se vieron capaces de hacer algo grande ante un rival de categoría. Encerraron al Sevilla y Gavi tuvo una primera gran ocasión a falta de diez minutos.

Un centro de Abde que el sevillano cabeceó fuera por muy poco. No obstante, la mejor ocasión para marcar y deshacer el empate fue para Dembélé. El francés, en una acción desde la derecha, se sacó un zurdazo que lo escupió el segundo palo.

El poste, con el meta ya batido, evitó el tanto.Y pese a dar entrada al final del partido a Luuk de Jong –de vuelta al Pizjuán, ahora como blaugrana– y aceptar alejarse de sus orígenes y de ese ‘ADN Barça’ que tanto busca Xavi Hernández, el Barça no pudo ganar para lograr entrar en puestos de Champions antes de cerrar este 2021 que no ha sido nada bueno. Xavi está dispuesto a liderar la reconstrucción con valentía. Con dos extremos y un equipo atacando.

Renunciando a futbolistas con más nombre, pero con un presente oscuro como Coutinho o Luuk de Jong. Apostando por una hornada de jóvenes ante uno de los mejores de la competición, en su casa y con un diluvio arrollador.Al final del choque, el Barça tuvo varias ocasiones para ganar, desbaratadas todas por un Bono que fue el mejor del Sevilla en los minutos finales, evitando en la última jugada del choque el gol de Jordi Alba, que remató a bote pronto un rechace de un córner.Fue otro empate, el quinto en ocho salidas en la Liga, y el tercero en los ocho partidos que lleva Xavi al frente del equipo, pero fue el primero en el que el Barça mereció claramente los tres puntos.

El equipo femenino busca poner hoy el cierre a un año perfecto

El Barça femenino quiere poner un broche de oro a un año histórico con una victoria en el duelo liguero que le medirá esta tarde al Madrid CFF (17.00h) en el Johan Cruyff y que cerrará el 2021 a nivel competitivo.

Un año de títulos, de récords y de reconocimientos que puede completarse con la victoria número 15 en 15 partidos de Primera Iberdrola, la 21 de 21 partidos sumando toda la temporada y la número 52 de 56 sumando todos los encuentros en el año natural.Tan solo dos empates (ante Atlético en la Supercopa y que acabó en derrota en los penaltis, y en Champions ante el PSG) y dos derrotas (ante el Atlético con la Liga pasada ya en el bolsillo y ante el City con la eliminatoria de cuartos de Champions sentenciada) deslucen mínimamente un curso realmente espectacular.El encuentro puede servir también de homenaje a toda una institución azulgrana como es la sevillana Melanie Serrano, que en caso de jugar hoy ante el conjunto madrileño disputará su encuentro 500 con la camiseta del Barça, la que más de la historia.