El Mollerussa prohíbe a sus radicales acceder al campo

La junta directiva del CFJ Mollerussa acordó ayer sancionar a los miembros de la peña de seguidores Urba’s 13, prohibiéndoles el acceso al Municipal durante el próximo partido, que el equipo jugará este fin de semana recibiendo al Valls. El motivo son los incidentes que el grupo de seguidores del equipo de la capital del Pla protagonizaron el pasado domingo en Tàrrega, tras el partido que el Mollerussa ganó 2-3. A la finalización del mismo un grupo reducido de miembros radicales de la peña agredieron al jugador del Tàrrega Hachim.

Jaume Vallverdú, presidente del Mollerussa, explicó que se sancionaba a la totalidad del grupo, unos 25, al no haber podido identificar a los causantes concretos de los incidentes, en especial de la agresión al jugador local. La junta, reunida ayer, aplicó la sanción amparándose en el artículo 26 de los estatutos del club que en su apartado G califica de susceptible de sanción “realizar actos violentos o que inciten a la violencia” y, en el O, la “participación enaltercados, peleas o desórdenes públicos en recintos deportivos, en sus alrededores o en los transportes organizados para asistir”.En el acuerdo de junta de ayer también se contempla que “los grupos de aficionados del Mollerussa deberán designar a dos responsables”, que serán los que se comuniquen con el club. También deberán ocupar en cada partido “los asientos designados por el club en cada partido” y añaden que “cualquier aficionado que haya sido denunciado por las fuerzas de seguridad por cualquier incidencia en un recinto deportivo, tendrá denegado el acceso a las instalaciones durante el resto de la temporada”.

En el cuarto punto de la nota que elaboró ayer especifica que “en el caso de que se produzca un incidente en la zona del grupo de aficionados y no se pueda identificar al infractor, se procederá a amonestar a todo el grupo”. También sancionarán a los que se salten el control de acceso al Municipal y entren saltando la valla o por puertas no autorizadas.Ante el Valls, el club, que tiene identificados a todos los miembros de la peña, controlará el acceso para impedir que entren y avisará a los Mossos para prevenir incidentes.