FOTOS | Lleida Esportiu: Del fallido Museu dedicado a Mario Duran a tener los trofeos tirado por el suelo
Un detalle de parte de los trofeos sin ni siquiera estar embalados.
El Museu del Lleida Esportiu, con el nombre del expresidente Mario Duran, anunciado a bombo y platillo por el presidente Albert Esteve en 2014, se quedó en un simple proyecto que no pasó de mostrarse una imagen virtual de ordenador de cómo sería y el inicio de unas obras que nunca se llevaron a cabo.
El club hizo una llamada a socios y aficionados para que aportaran material y estaba pensado por los ya exdirigentes para que fuera ubicado en la primera planta del Camp d’Esports, junto a las oficinas de la entidad. La inauguración del Museu Mario Duran debía coincidir con la celebración de los 75 años de fútbol en la ciudad, bajo las diferentes denominaciones que ha ido teniendo el Lleida a lo largo de este periodo de tiempo, que se cumplía el 20 de octubre de 2014.
La realidad ha sido otra. Aunque los principales trofeos y copas se encuentran en la sala noble del Camp d’Esports, la inmensa mayoría de ellos están tirados en los almacenes que hay en los bajos del estadio, en medio del más absoluto de los abandonos.
Es solo un detalle más de la dejadez a la que ha llegado el club en esta década bajo el mando de los hermanos Esteve. Los trofeos de un club, por modestos que sean, son de un valor sentimental incalculable para los aficionados.
Un detalle de parte de los trofeos sin ni siquiera estar embalados.
Un detalle de parte de los trofeos sin ni siquiera estar embalados.
