El Cadí La Seu gana su partido después de superar un brote de Covid

El Cadí La Seu, que finalmente pudo contar con todas sus jugadoras, aunque algunas arrastrando aún las secuelas de la Covid, se sobrepuso a las adversidades y al cansancio para ganar (55-51) a Estudiantes, que llegaba con muchas bajas, y seguir la estela de los grandes de la Liga. Irati Etxarri, una de las más afectadas por el último brote, fue la encargada de abrir el marcador con tres puntos seguidos, que tuvieron la réplica rápida de las colegialas de la mano de Fingall, con un triple y dos tiros libres, y Diallo, que pusieron el marcador en un 3-7 llegado al ecuador del periodo. Sabedor de lo justo que llegaban sus jugadoras a este partido, Bernat Canut hizo muchas rotaciones para dosificar los esfuerzos y hasta situó a sus dos bases para controlar más el juego. Fue precisamente la entrada a pista de Laia Raventós la que revolucionó el juego local con sus dos triples y sus pases, que permitieron al cuadro urgelense darle la vuelta al marcador y llegar al final del primer cuarto dominando por cinco puntos (14-9).

El Cadí ejerció un mayor dominio en el segundo asalto. Nada más arrancar alcanzó una máxima renta de nueve puntos (18-9), que logró mantener (23-14) pese a la tímida reacción madrileña, gracias a un triple de Etxarri y una canasta de Raventós, las más entonadas ayer. Pero las leridanas entraron en un pequeño bache y Estudiantes lo aprovechó para meterse en la lucha con otro miniparcial de 0-5. Canut paró el partido y el triple nada más volver al juego de Strautmane pareció romper la dinámica, pero no fue así. Otro parcial de 0-6 de las colegialas, que estaban dominando el rebote ofensivo, obligó al técnico urgelense a pedir de nuevo un tiempo muerto con el marcador apretado (26-24). Por suerte, un triple de Pivec y una canasta sobre la bocina del final del periodo de Laura Peña permitieron al Cadí irse a los vestuarios ganando por cinco puntos (31-26).

A la vuelta, el conjunto del Alt Urgell recuperó los ocho puntos de renta merced a Etxarri, letal en la penetración, y a un triple de Laura Peña (36-28). Tuvo un par de acciones más para superar la decena de puntos, pero Strautmane erró dos triples seguidos y Estudiantes volvió a reaccionar gracias a su dominio en el rebote ofensivo, que le dio segundas y hasta terceras opciones de ataque. Ahí empezó a imponer su ley Diallo. Un 2+1 de la canaria volvió a poner a su equipo a dos puntos (36-34), pero un triple de Raventós dio algo de tranquilidad (39-35) en un tercer cuarto muy impreciso, como prueba el 8-9 de parcial global.

En el inicio del último capítulo siguieron las imprecisiones, con muchas pérdidas y tiros precipitados, algunos en los finales de posesión que no tocaron ni aro. Prueba del desaguisado es que la primera canasta en juego llegó a cinco minutos del final y la anotó Pivec, para poner al Cadí de nuevo con su máxima renta, nueve puntos (44-35), gracias a que antes, en el inicio del cuarto, Ari Pujol y Tunstull habían anotado tres tiros libres. Ese parcial de 5-0 pareció romper el partido, y más cuando las urgelenses alcanzaron los once de ventaja (48-37), a solo dos minutos y medio para el final. Pero Estudiantes no tiró la toalla y llegó a situarse a cuatro (50-46), con 22 segundos aún de juego efectivo. Pero los tiros libres de Raventós y una antideportiva de Diallo acabaron finiquitando la decimotercera victoria de un Cadí que sigue ejerciendo de equipo revelación para mantenerse arriba.

“Nos hemos llevado una victoria trabajada y de mucho mérito”

Bernat Canut aplaudió la implicación de todas sus jugadoras en un duelo que afrontaban en precario por culpa de la Covid. “Ha sido un partido duro y trabado en ciertos momentos. Los dos equipos llegábamos mermados, nosotros es verdad que teníamos a las diez jugadoras, pero con cinco de ellas volviendo de un confinamiento. Aun así, no podíamos bajar nuestro nivel defensivo si queríamos competir. Hemos hecho muchas más rotaciones que en un partido normal, es lo que teníamos que hacer, y si bien no hemos estado acertados en ataque, nos hemos llevamos una victoria muy trabajada y de mucho mérito para las diez jugadoras, que se han sacrificado”, dijo.

Y añadió: “Ahora tenemos la moral alta porque acabamos de ganar un partido que 48 horas antes parecía muy complicado, y estos encuentros que nos vienen ahora tan seguidos nos tienen que servir para ponernos a tono”.