SEGRE

OLIMPISMO JUEGOS DE INVIERNO 2030

El Parc del Segre de la Seu d'Urgell: Un legado que perdura de los Juegos del 92

Los Juegos del 92 en La Seu, que transformaron la ciudad y dejaron un Parc del Segre rentable deportiva y turísticamente, referente para los del 2030 || Es una instalación pionera en sostenibilidad

Vista aérea del Parc del Segre que tiene instaladas placas fotovoltaicas para autoconsumo eléctrico.

Vista aérea del Parc del Segre que tiene instaladas placas fotovoltaicas para autoconsumo eléctrico.

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El proyecto para acoger unos Juegos Olímpicos de Invierno en el Pirineo, en los que el leridano será partícipe, se presenta, a priori, como una gran oportunidad para el territorio. Así lo creen desde La Seu d’Urgell, cuyo referente son los Juegos de Barcelona 92, que dejaron un “legado positivo” en la ciudad, que se ha convertido en un referente internacional en aguas bravas, tanto en la vertiente deportiva como en el ámbito turístico, como asegura el exgerente del Parc del Segre, Francesc Ganyet, jubilado hace unos meses y que ha sido relevado por Meritxell Rodríguez, expalista del equipo estatal de eslalon y árbitra internacional. A la espera de saber el apoyo territorial con el que cuenta el Govern en la consulta del 24 de julio para sacar adelante la candidatura olímpica de los Juegos de Invierno 2030, donde casi toda la voz y voto es para las comarcas leridanas, Ganyet considera que “acoger unos Juegos de Invierno en 2030 debería suponer reproducir el legado que aquí dejaron los de verano del 92. Es un legado que no se limita a los 15 días de competición, sino que perdura en el tiempo. Hubo un antes y un después para nuestra ciudad”.

No habla en vano. Bastan unas cifras. En términos deportivos, el Parc del Segre ha acogido 19 Copas del Mundo y ya están otorgadas las de este año y 2023 y pedida la de 2024, además de tres Mundiales y un Europeo. Solo ha dejado de acoger competiciones de primer nivel internacional cuatro años desde los Juegos de Barcelona 92.

Desde el punto de vista del turismo de naturaleza, el Parc Olímpic duplicó beneficios en 2018 y recibió un 12% más de visitantes, hasta 38.000, después de crear la marca turística Rafting Parc La Seu d’Urgell.Y no se trata solo de cifras. Francesc Viaplana, alcalde de la capital del Alt Urgell, incide en que los Juegos del 92 supusieron “una transformación de la ciudad y una mejora urbanística” para una zona que estaba degradada a raíz de las riadas de 1982. “Hay que reconocer la apuesta que hizo el alcalde Ganyet (Joan) al construir un parque urbano con una minicentral hidroeléctrica y un circuito cerrado de aguas bravas.Ahora que se habla de sostenibilidad, fuimos pioneros a nivel mundial con esa instalación”, subraya Viaplana.

El Alt Urgell es la comarca más poblada (con más de 20.000 habitantes) del Alt Pirineu i Aran que decidirán si quieren que siga adelante la candidatura, aunque después no vaya a ser subsede (se habla de que acogería mushing, disciplina no olímpica). Según el alcalde de La Seu, “es muy difícil hacer un pronóstico acerca de la consulta”, pero confía en que “la gente vea una gran oportunidad”. Francesc Viaplana intenta mesurar su valoración acerca de la cita olímpica. “Huiría de los extremos. Ni serán una catástrofe para el Pirineo ni tampoco la solución a los problemas que tenemos. Además, los Juegos del 92 son un referente, pero no son comparables a los de 2030 porque eran de diferente estación y, por tanto dimensión, y no es la misma situación la de los años 90. Aún así, las inversiones que se harán en infraestructuras y telecomunicaciones deben hacerse sí o sí”.

Aragonès descarta ceder alguna prueba a Aragón

El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, descartó ayer ceder a Aragón alguna de las pruebas de la candidatura de los Juegos Olímpicos de Invierno de 2030 que el acuerdo técnico ha adjudicado a Catalunya: “No modificaremos las sedes de las pruebas”.En rueda de prensa posterior al Consell Executiu, defendió que el acuerdo de distribución de pruebas es “bueno” y equilibrado entre Catalunya y Aragón, y reiteró que no contempla que se modifique este pacto. Aragonès sostuvo que no hay un problema entre la Generalitat y el gobierno de Aragón, sino que hubo un consenso en la comisión técnica en la que también participa el Comité Olímpico Español (COE) y el gobierno central, y el Ejecutivo aragonés se desmarcó: “No es un tema de que nos peleemos dos”, dijo.

El presidente catalán aseguró que no tiene previsto hablar con el presidente aragonés, Javier Lambán, y añadió que no le corresponde a él decir si tiene que haber una reunión, después de que el jefe del Ejecutivo de Aragón plantara a Aragonès en el encuentro que tenían previsto en enero.Al ser preguntado por si ve posible que Catalunya acoja los Juegos si Aragón se acaba descolgando del proyecto, rechazó avanzar escenarios porque aseguró que no se está en este punto: “No entraré a especular sobre soluciones alternativas”.

Lambán amenaza con candidatura

El presidente de Aragón, Javier Lambán, reclamó a su homólogo catalán, Pere Aragonès, que sea “más empático y comprensivo”, después de que este reiterase que no cambiará la ubicación de las pruebas de los Juegos que constan en el acuerdo con el COE y la Moncloa. “Ya debemos tener mucha paciencia con los amigos catalanes con sus consultas y referéndums y no aceptaremos ningún desequilibrio”, dijo Lambán. El presidente de Aragón avisó de que si Catalunya no acepta ningún cambio, ellos plantearán hacerlos “íntegramente” en territorio aragonés.

Un impulso para la tecnificación

Aida Castellà, directora del Centre de Tecnificacion d’Espòrt d’Iuèrn de la Val d’Aran, ve el proyecto olímpico como “una buena oportunidad para crear una estructura formativa consolidada de los deportes de invierno. Necesitamos un impulso más”, dice Castellà. Hay 62 deportistas de 12 a 21 años de alpino, alpino de base, freeride, freeski, fondo, snowboard y patinaje. “Además de los objetivos deportivos y académicos de la formación en carrera dual, hemos convertido a las normativas del centro en compromisos de sostenibilidad”, dice Castellà.

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