Barça y Manlleu se proclamaron ayer campeones respectivamente de la Copa del Rey y de la Reina, en la edición disputada en el Onze de Setembre de Lleida, la primera vez en la historia que las dos competiciones se disputaban en una misma sede. Los azulgranas no dieron ninguna opción y golearon por 4-0 al Reus Deportiu, verdugo del Finques Prats Lleida Llista en semifinales, mientras que las barcelonesas revalidaron el título logrado el año pasado al batir al Palau de Plegamans, vigente campeón de Europa, en la tanda de penaltis, después de finalizar los 50 minutos reglamentarios con 2-2 y la prórroga con 3-3. El Barça, que vuelve al trono copero tres años después (ganó en 2019 ante el Liceo en la edición disputada en Reus), sufrió bastante menos que en la semifinal ante el Noia (1-2), resuelta con un gol de Pau Bargalló a falta de 13 segundos.
El internacional de Sant Sadurní fue otra vez determinante en su equipo. Fue el autor de la asistencia a Nil Roca que establecía el definitivo 4-0, y fue designado MVP de la Copa.Se le puso bien la final al Barça al inicio, a partir del penalti parado por Sergi Fernández a Gelmà a los 4 minutos. Joao Rodrigues abría la cuenta en el minuto 8 al aprovechar el rechace de un penalti lanzado por él mismo, y Matías Pascual sentenciaba con un doblete antes del descanso.Mucho más igualada fue la final femenina, la reedición del año pasado.
El Palau tomó ventaja muy pronto, pero el Manlleu logró darle la vuelta antes del descanso (1-2). Las vigentes campeones de Europa forzaron la prórroga y se adelantaron en la primera parte del tiempo extra, pero Nara López, bigoleadora ayer, mandó la final a los penaltis, donde las vigentes campeonas estuvieron más certeras (1-3).