DEPORTES
Lluís y Andreu Tomàs ya son eternos
Sus camisetas cuelgan desde ayer en lo alto del Onze de Setembre || “Es un honor porque esta es nuestra casa”
Lluís y Andreu Tomàs ya forman parte de la historia del Llista. Ya eran un emblema, por trayectoria y éxitos, pero desde ayer lo son también ‘físicamente’ con sus camisetas colgadas en lo alto del Onze de Setembre. Aún con el mal sabor de boca que había dejado el desenlace del partido, arrancó el merecido homenaje a los hermanos Tomàs, el ya exportero Lluís, retirado al final de la campaña 2019-2020, en plena pandemia, que hizo imposible recibir entonces el reconocimiento, y el capitán Andreu, que hace semanas anunció que colgaba los patines al término de la presente campaña.
“Es un honor que el club que amas te haga este reconocimiento. Esta es mi casa, porque así lo siento. Me alegro de poder despedirme ante mi afición y de mis amigos, y espero que estas camisetas simbólicas estén también cerca del cielo”, dijo en alusión a su padre, fallecido hace años y que fue clave en las trayectorias de ambos hermanos.
Andreu, por su parte, abrió su alocución agradeciendo la presencia de los aficionados “pese al calor”, y avisó que “iremos a Reus a intentar que este no sea el último partido de la temporada en casa”, al tiempo que agradeció que la plantilla del Reus se quedara en la pista viendo el acto. También agradeció las muestras de cariño, especialmente al presidente, Enric Duch, y al entrenador, Albert Folguera. “Siempre os he considerado mis padres deportivos”, dijo antes de romper a llorar.
“Es una alegría inmensa, mucho orgullo de formar parte del Llista y del Onze de Setembre, que es mi casa. Cuando era pequeño era inimaginable ver mi camiseta colgada. Con el tiempo le daremos la importancia que se merece”, indicó.