FÚTBOL LIGA DE CAMPEONES
El Real Madrid gana su 14 Champions al derrotar al Liverpool con un gol de Vinícius y una gran actuación de Courtois
El partido se retrasó por un bochornoso incidente en los accesos
El Real Madrid conquistó ayer la Copa de Europa al derrotar por 1-0 al Liverpool. El equipo blanco logró su Champions número 14 gracias a un gol del brasileño Vinícius en el minuto 59 y, especialmente, por la gran actuación del meta belga Thibaut Courtois, que paró los innumerables remates del equipo inglés, lo que le valió, además, ser reconocido como el ‘hombre del partido’. Pero si el Madrid volvió a inscribir su nombre en la historia del fútbol, la UEFA lo hizo en el del bochorno, mostrando una incapacidad organizativa que no es nueva.
El caos que se vivió en la final de la Eurocopa en Wembley hace menos de un año se repitió ayer en las puertas del Stade de France. Robos a aficionados, saltos de vallas, agresiones y una alarmante falta de seguridad y control llevaron al retraso de la final de la Liga de Campeones, algo inédito en el fútbol moderno. Miles de aficionados entraron en tromba al campo de Saint Dennis para intentar burlar la seguridad y aprovecharse de las endebles defensas francesas, que no pudieron parar a la marabunta que atacó las puertas. Una imagen que recordó mucho a la vivida en la Eurocopa el año pasado, cuando un centenar de aficionados consiguió colarse por las entradas para discapacitado de Wembley, en el mayor caos organizativo que ha vivido la UEFA.
Courtois fue el encargado de frenar a un Liverpool poderoso, que dominó, creó más ocasiones, pero fue castigado en el único disparo a puerta del Real Madrid. Suficiente para apelar a todos los tópicos blancos, las remontadas imposibles y su idilio con esta competición.
El Liverpool pide explicaciones y una investigación
El Liverpool emitió un comunicado pidiendo explicaciones a la UEFA por lo ocurrido en los accesos al Stade de France y pidió una investigación sobre los hechos. Miles de aficionados del Liverpool tuvieron que esperar durante horas para poder entrar al estadio, sufriendo atracos, agresiones y siendo gaseados por la Policía. La UEFA atribuyó el caos a entradas “falsas”.