Adiós con honor del lCG Força Lleida

El sueño quedó en eso, en un sueño que el ICG Força Lleida no pudo hacer realidad por su mal primer cuarto. Venía sin presión, como el tapado, sin entrar en las quinielas, pero las ansias de rozar la gloria de la ACB le pudieron. Acabó cediendo 68-77 ante un Girona más efectivo para cerrar una temporada histórica, que para nada queda empañada por la derrota de ayer.

La puesta en escena del ICG Força Lleida fue nefasta, a años luz de lo que nos tiene acostumbrados. Salió falto de tensión y atacando desorganizado y sin ningún criterio. Badji jugándose lanzamientos desde media distancia, lejos de su rango de influencia, y Carrera forzando mucho en las penetraciones.

Al otro lado, festival anotador de un Girona que comenzó desbocado. Gerard Encuentra tuvo que parar el partido dos veces en menos de tres minutos. Primero superado el ecuador del periodo con un elocuente 4-14, y luego cuando iba perdiendo de 18 puntos (4-22).Lo había intentado todo, pero sin suerte.

Hasta hizo reaparecer a Ignacio Rosa después de casi dos meses inactivo. Precisamente el gaditano firmó la primera canasta después de más de tres minutos de sequía anotadora, pero la situación no mejoró, es más, fue a peor en el segundo cuarto. El equipo jugaba sin timón, con Marcos desaparecido y con su referente, Michael Carrera, fuera del partido por la dura defensa local, que gozó de la permisividad de los colegiados, en especial de Paula Lema, que le avisó cuando el venezolano aplaudió tras señalarle una falta a favor.

El castigo no tardaría en caerle a Carrera, que vio la tercera personal faltando todo un mundo. El Girona siguió a lo suyo y en el ecuador del periodo ya dominaba por 20 puntos (21-41), después de un 2+1 de un inteligente Gasol, que hizo picar a Badji. Un parcial de 6-0 de los leridanos, con sendos triples de González y Schreiner (27-41), obligaron a Jordi Sargatal a parar el partido.

No quería correr ningún riesgo, sabedor de lo que es capaz el equipo de Encuentra. A la vuelta, el Girona respondió con la misma medicina, el triple. Uno del exNBA, otro de Vecvagars y un tercero seguido de Fjellerup situó la desventaja en los 25 puntos (28-53).

Mucho tenían que cambiar las cosas tras el descanso si el ICG Lleida no quería despedirse de la final muy pronto, y el cambio llegó de la forma más inesperada, la lesión de Marc Gasol. Medio minuto después de que Hughes se lastimara el tobillo derecho (pudo seguir jugando), el de Sant Boi, en pugna por un rebote defensivo, se lesionó la rodilla izquierda, teniendo que irse a los vestuarios ayudado por miembros de su staff.A partir de ahí el Girona fue para abajo y el Lleida hacia arriba. Carrera empezó a entrar en juego y, sobre todo, Badji, que se vio más liberado.

Seis puntos suyos, dos de ellos tras un tapón previo en defensa, contribuyeron a un parcial de 17-8 que hizo que la desventaja se redujera a 13 puntos (48-61) al final del tercer cuarto. Quedaba un último asalto, y el Força Lleida lo comenzó al alza, ante un Girona que parecía haber entrado en shock con la lesión de su estrella, que recibió la ovación de su público al volver al banquillo. Los de Gerard Encuentra siguieron en modo remontada y Badji y Carrera situaron a su equipo a 11 puntos de su rival con casi todo el cuarto por jugarse.

Con 52-63, el venezolano erró una penetración en teoría fácil y en la contra Fjellerup castigó con una entrada salvando el tapón de Badji para dar aire a su equipo (52-65).Carrera se desquitó poco después anotando un triple que situaba al Força Lleida a diez puntos (55-65), ante una afición que ya creía en otra remontada épica de los suyos. La pelota quemaba en las manos de los gerundenses y entre tanto nerviosismo apareció un protagonista inesperado, Eric Vila, que con cuatro puntos seguidos tranquilizó los ánimos locales. Hughes aguantó el tipo, pero Josep Franch tiró de galones para sellar la victoria y el billete para la gran final, donde el Girona luchará por un puesto en la ACB con el Estudiantes.

La final esperada por todos ya está servida.

Mejoró en la segunda mitad, llegó a situarse a diez puntos, pero no acabó de rematar la faena

La lógica decepción por la derrota no hizo olvidar al técnico, Gerard Encuentra, la gran temporada que ha hecho el equipo. “Si el 1 de septiembre alguien dice que hoy estaríamos aquí jugando la Final Four, lo hubiéramos tratado de loco”, afirmó. “Con el tiempo valoraremos más la temporada que hemos hecho”.

Nada más comparecer en la sala de prensa, el entrenador felicitó al Girona y “a mis chicos y la gente de Lleida” y en concreto, del equipo, dijo que “estoy muy orgulloso de ellos, se han vaciado hasta el último minuto”.Del partido comentó que “se ha marcado claramente en nuestro inicio. Hemos salido blandos, ellos lo han hecho con mucho acierto, se lo han creído, a nosotros nos han entrado dudas y hasta el minuto 8 no hemos empezado a competir de tú a tú contra ellos”, valoró. “Con la lesión de Marc Gasol hemos tenido un poco de empuje, parecía que nos íbamos a meter en el partido, pero hemos estado poco acertados en los momentos clave”.

Añadió que “me sabe mal por la gente que ha venido, porque se merecía un final mejor”.Lafuente y González, por su parte, coincidieron en el mal inicio del equipo y en la gran temporada que han hecho.