GIMNASIA ARTÍSTICA
Arte sobre el tapiz
Más de mil gimnastas de toda España de dan cita desde ayer hasta el domingo en el Barris Nord, entre ellas la leridana con Down Àngela Mora || Es el Estatal de todas las categorías de base
El pabellón municipal Espai Fruita-Barris Nord dejó ayer a un lado las canastas de baloncesto y se llenó de aparatos y pequeñas gimnastas con la disputa del Campeonato de España Base de gimnasia artística femenina que reunirá en Lleida a más de mil participantes hasta el domingo. De entre todas las gimnastas, hay 38 leridanas, 17 de ellas del Gimnàstic Lleida y 20 del club FEDAC, que ha sido el artífice, junto a la voluntad de la Paeria, de traer esta competición a la capital del Segrià. Todo gracias a la presencia en la competición de una de las gimnastas del FEDAC, Àngela Mora, la joven de Maials de 17 años que el pasado diciembre hizo historia al convertirse en la primera gimnasta con síndrome de Down que participaba en un torneo estatal para deportistas sin discapacidad.Àngela, cuya foto es una de las que ilustran el cartel que anuncia la competición, ya entró en competición ayer en Base 2.
“Me he liado un poquito en uno de los ejercicios, pero no pasa nada porque me estoy divirtiendo. Como decimos en el club no es campeón quien gana sino quien lo intenta”, señalaba la joven leridana, siempre escoltada por su entrenadora y directora técnica del FEDAC, Maribel Moncasí.También compitieron ayer en Base 5, siete gimnastas del Club Gimnàstic Lleida. Son Cecilia Alonso, Laia García, Paula Cabrero, Anna Guardiola, Mariona Ballesté, Judith Pérez y Blanca Rizos.
En alguno de los aparatos iban clasificadas en primera posición, pero no se sabrá hasta hoy cómo queda su resultado final. En cada ejercicio, las entrenadoras de todos los clubes participantes estaban pendientes de la ejecución de los movimientos de sus gimnastas y dando las oportunas indicaciones. Incluso en algún momento, alguna echaba una mano, sobre todo en el aparato de barras.
Aun así, los fallos en estas edades de iniciación no son un gran problema. “Les sirve para aprender, son cosas que tienen que pasar. Se les consuela porque ellas mismas son exigentes.
Nuestro papel es ayudarlas, la próxima vez será de otra manera y no pasa nada”, explicaba una entrenadora de uno de los clubes participantes. No obstante, el mérito de las pequeñas gimnastas es grande, ya que realizan movimientos que no están al alcance de cualquiera. Hasta el domingo la competición podría movilizar a más de 4.000 personas entre familiares y acompañantes.