Mazazo inaugural

El Lleida Esportiu se marchó de vacío de Teruel (1-0) en un partido que hizo recordar fantasmas del pasado. Como sucedió la temporada pasada, una genialidad de los locales, en esta ocasión de Villa (74’) sirvió para dejar al Lleida sin capacidad de sobreponerse al golpe de recibir un gol en contra y acabó claudicando en Pinilla. En una primera mitad que no pasará a la historia por el despliegue ofensivo de ninguno de los dos equipos, los azules se encomendaron al talento de futbolistas como Agüero o Quadri para intentar desarmar el sistema defensivo de los aragoneses.

Pero en el primer tiempo se impusieron claramente las defensas a los ataques. Iñaki Álvarez, debutante bajo palos, tuvo que intervenir un par de veces en los primeros compases, y aunque se mostró más seguro con las manos que con los pies, solventó todo el peligro generado a su alrededor. No tuvo que actuar en la acción más peligrosa del Teruel en la primera parte, en un centro tenso desde la banda izquierda que ni Figueras ni Gaixas acertaron a despejar y dos jugadores locales, en clara posición de remate, se acabaron estorbando.Sirvió este acercamiento como aviso al Lleida, que se desperezó sobre la media hora con la ocasión más clara del partido.

Agüero, llegado desde Primera Federación para marcar diferencias, dibujó una vaselina (34’) que solo vio él y que a punto estuvo de entrar en la portería de un imponente Taliby Konaté.Pero fue un espejismo, porque la primera parte acabó sin más ocasiones en ninguna de las dos áreas. En buena parte, porque Chuli cayó hasta en cuatro ocasiones en fuera de juego, frustrando todos y cada uno de sus buenos desmarques a la espalda de la defensa.Tras el descanso, el Teruel volvió a salir con más presencia en campo contrario, como lo hizo en el tramo inicial del partido.Y a los diez minutos de la reanudación, una combinación entre Kevin Lacruz y Stéphane Emaná acabó en una doble ocasión que pudo desbaratar la defensa del Lleida con apuros. Ambos entrenadores movieron el banquillo en busca de soluciones, y fue precisamente uno de los que salieron desde el banquillo quien acabó decidiendo el signo del partido: Dani Villa.

Formado en el fútbol base del Villarreal, donde coincidió con Pere Martí hace algunas temporadas, se propuso amargarle el primer partido en el banquillo del Lleida a su antiguo entrenador. Y así fue.En el minuto 68, cuando apenas llevaba tres minutos sobre el verde de Pinilla, estuvo a punto de marcar el primero con un cabezazo que obligó a Iñaki Álvarez a hacer una gran parada.Pero seis minutos más tarde, no dio ninguna opción al portero navarro. Se plantó en la frontal y mandó un disparo directo a la escuadra que cerró la primera derrota de la temporada en un campo que va camino de convertirse en maldito.

En las cinco visitas a Pinilla siendo Lleida Esportiu, el bagaje es de dos empates y tres derrotas, todas ellas por la mínima. El nuevo entrenador del Lleida, Pere Martí, se mostró contrariado en la rueda de prensa posterior al partido. El castellonense lamentó que el gol de Villa pudo haberse evitado, “No hemos estado bien en la jugada del gol”, lamentó.

Además, explicó que lo que más le preocupó fue la falta de reacción después de encajar el tanto. “No supimos reaccionar, esperaba algo más”, añadió. Por el contrario, quiso poner en valor las cosas buenas que hicieron sus jugadores.

“En la primera parte me ha gustado mucho el equipo”, destacó, antes de asegurar que “hemos hecho el partido que teníamos que hacer”. Quiso acabar mandando un mensaje de calma, y que, pese a perder el partido, no hay que echarlo todo a perder. Una idea que repitieron el suizo Loris Mettler y el navarro Iñaki Álvarez, que ya piensan en el partido del próximo domingo (17.00h), en el Camp d’Esports contra el Ebro.

“Las sensaciones han sido buenas, aunque nos vamos con una derrota”, sentenció Mettler. Iñaki Álvarez, por su parte, transmitió el pesar del vestuario, dolido tras la derrota. “Me gusta ver que el vestuario está jodido, porque demuestra que la gente cree y quiere que el proyecto vaya bien”, dijo el portero navarro.“Lo primero que hemos dicho tras el partido ha sido que hay que pensar desde ya en el partido del Ebro para sacar los primeros tres puntos de la temporada en casa”, concluyó el guardameta.

El Lleida Esportiu amplía sus fronteras

El encuentro en Pinilla sirvió para que Loris Mettler y Quadri Liameed entraran en los libros de historia del Lleida Esportiu. Con su debut en partido oficial, se convirtieron, respectivamente, en el primer suizo y el primer nigeriano en jugar con el equipo ilerdense desde su fundación, en 2011. En el caso de Nigeria, cabe matizar que sí que hubo uno que vistió la camiseta de la desaparecida Unió Esportiva Lleida.

Se trata de Michael Emenalo, que disputó 22 partidos en la temporada 1997/98, anotando un único gol en su etapa en la UE Lleida.

Iñaki Álvarez, con el escudo fuera de lugar

La primera alineación en Liga del Lleida Esportiu tuvo un nuevo integrante bajo palos. El navarro Iñaki Álvarez ocupó el sitio habitual de Ramon Vila, sancionado cuatro partido, y lo hizo con un detalle curioso en su indumentaria.

Al contrario que todos sus compañeros, en su camiseta, con el 13 a la espalda, el escudo del Lleida Esportiu aparecía en la parte derecha de la camiseta, y la marca de ropa estaba a la izquierda, donde suele estar el escudo. Si era producto de una superstición, no funcionó, aunque Iñaki poco pudo hacer en el gol.

Pólvora mojada para empezar la Liga

Puede sonar a tópico, pero los partidos, en esta categoría, suelen decidirse por detalles.

Así se evidenció en la primera jornada del campeonato liguero, donde ningún equipo fue capaz de anotar más de un gol. El Lleida se quedó sin marcar ante un Teruel que sí que lo consiguió. El Ebro-Terrassa y el Saguntino-Ibiza finalizaron con empate a uno, mientras que el Peña Deportiva-Formentera y el Mallorca B-Hércules no tuvieron goles.

El resto de partidos: Espanyol B 1-0 Olot; Valencia B 0-1 Manresa, Prat 0-1 Zaragoza B y Badalona 1-0 Alzira.