El Cadí abre una nueva era

El Cadí La Seu arranca esta tarde (20.00) en el Palau d’Esports, donde recibirá al debutante Jairis murciano, una nueva era después de la marcha de dos de sus principales referentes las últimas temporadas, Bernat Canut en el banquillo, el técnico más exitoso en la historia de la entidad, y la navarra Irati Etxarri en la pista, su jugadora franquicia, que curiosamente seguirán compartiendo aventura, pero ahora en el Uni Girona. Sin el técnico que ha llevado al equipo a clasificarse para Europa tres veces en cuatro campañas, el club mantuvo su filosofía y miró en casa para suplir su marcha, apostando por su segundo, Jordi Acero, la misma fórmula que ya hizo en el anterior relevo técnico y que tan buen resultado le ha dado. Además, la dirección técnica capitaneada por Pep Ribes logró lo que nunca antes había conseguido en las quince temporadas anteriores en la Liga Femenina, renovar a más de la mitad de la plantilla, lo que supone un plus a nivel de cohesión.

Las bases Laura Peña (elegida la pasada campaña jugadora revelación de la Liga) y Laia Raventós, las escoltas Ariadna Pujol y Júlia Soler, la alero letona Paula Strautmane y las pívots Montse Brotons y la estadounidense Jewel Tunstull siguen en el proyecto, que se ha reforzado con la vuelta de Geo Bahí y cuatro extranjeras que dotan al equipo de una mayor fortaleza y variedad de recursos. La estadounidense Taylor Koenen está llamada a ser una de las referencias ofensivas del equipo, que gana fuerza interior con la llegada de la búlgara Maria Kostourkova y la montenegrina Bojana Kovacevic, que todavía no se ha podido estrenar por culpa de una enfermedad, al igual que la base Elise Ramette, que ayer llegó a La Seu después de participar con Bélgica en el Mundial de Australia. La internacional belga, que hoy por la mañana hará su primer entrenamiento, estará a la disposición de Jordi Acero, no así Kovacevic, que está haciendo su particular pretemporada tras casi tres semanas sin entrenar, ni Strautmane, que ya podría reaparecer dentro de una semana en la pista del Estudiantes.

Pese a la falta de efectivos y los problemas físicos que han alterado, y mucho, la pretemporada, el equipo no podía tener un mejor arranque conquistando la Lliga Catalana, como ya hizo la temporada pasada. “Llegamos al inicio de Liga mucho mejor que hace cinco días. Uno de los objetivos que nos habíamos marcado como equipo era volver de Girona (donde se jugó la Lliga Catalana), ya fuera habiendo jugado un partido o los dos, siendo mejores como grupo y equipo, y pienso que esto lo hemos conseguido.

Después de casi dos semanas sin poder entrenar cinco contra cinco, hemos afrontado dos partidos de nivel y, además, hemos conseguido revalidar el título de la Lliga Catalana que, para un club como el nuestro, que no está acostumbrado a ganarlos, haber logrado dos en dos años es muy importante”, señaló Acero.Pese a reconocer que la marcha de Etxarri “es insustituible”, asegura que, con los refuerzos, “tenemos más recursos a nivel ofensivo”, aunque deja claro que “la clave para nosotros es no focalizar el juego en una o dos jugadoras sino en el juego colectivo, en compartir la pelota, y creo que todas las jugadoras que tenemos nos pueden aportar puntos y pueden sumar”, añadió. Tampoco quiere hablar de retos a largo plazo. “No quiero marcarme ningún objetivo, más teniendo en cuenta que es mi primer año como entrenador, pero es evidente que nos gustaría entrar en la Copa de la Reina.

Pero tenemos que ir paso a paso, consolidándonos como grupo y con el paso de las jornadas veremos si estamos para entrar en la Copa o dónde estamos”, dijo Acero, que también avisó que “a finales de octubre comenzaremos la EuroCup y veremos cómo afrontamos el desgaste físico de dos competiciones”.