Una deportista diez

“Aquí en Estados Unidos te dan más facilidades para compaginar estudios con el deporte de alto rendimiento y por eso vine, pero los primeros meses fueron duros, sobre todo por el idioma”. La nadadora del CEN Balaguer, Aurembiaix Pifarré Planes (Balaguer, 4-9-2003), decidió saltar el charco el verano del pasado año, como antes han hecho otros deportistas leridanos, para proseguir su trayectoria académica y deportiva en una universidad estadounidense y el doble reto lo está superando con creces en la Saint Francis University, el centro donde estudia que está ubicado en la población de Loretto, estado de Pennsylvania. Está en su segundo curso y durante cuatro estudiará dos carreras, Computer Science, el equivalente aquí a Informática o Ingeniería de Sistemas, y Matemáticas.

Además, compite con el equipo de la universidad en la Primera división, la más alta, de la Liga universitaria (NCAA). Solo le costó un trimestre empezar a dejar huella. El curso pasado batió el récord de la piscina de su universidad en la prueba de las 500 yardas, la equivalente estadounidense a los 400 metros libre.

Su tiempo (5:06.42) y su nombre ya figuran en un gran panel que hay colocado en el mismo recinto junto a todas las plusmarcas en las diferentes distancias que se han logrado en dicha piscina, la ‘Natatorium Pool’. Asimismo, Aurem, como han abreviado su nombre en la universidad, ganó medalla al ser tercera en la final de conferencia con el relevo 4x200 yardas y finalista individual en otras dos pruebas, además de ser elegida la mejor rookie de la conferencia tras ser designada durante el curso mejor nadadora de la semana e integrante del equipo de la semana. “Todavía ha comenzado mejor este curso”, dice David, su padre, que es entrenador del CEN Balaguer.

Y es que en octubre fue elegida nadadora de la semana tras ganar las pruebas de 500 y 1.000 yardas. Entrenan de lunes a sábado y les adaptan las sesiones a los horarios de las aulas. “Tuve varias propuestas en su día, pero esta de la Saint Francis fue la que más me convenció.

No porque el equipo compita en Primera división, ya que hubiera preferido uno de Segunda para no presionarme. Lo hice porque académicamente es de las mejores. Hace cuatro años fue elegida la mejor de EEUU”, explica la balagariense.

La exigencia académica norteamericana, que no permite competir a los alumnos si no aprueban y, a veces, incluso pidiendo una nota alta, no ha sido obstáculo tampoco para la leridana, que sacó matrícula de honor el curso pasado.Y eso que conseguir estudiar en una universidad norteamericana gracias a una beca no es nada fácil. Todos los trámites se hacen a través de agencias especializadas, como ha sido el caso de Aurembiaix. Además, tuvo que superar el SAT, un examen de comprensión escrita y matemática en inglés, equivalente al examen de selectividad en España.

Y también el TOEFL, un examen de inglés para estudiantes de habla no inglesa.

Entre competiciones, visitó Nueva York y las cataratas del Niágara

“Apenas nos queda tiempo libre, pero como llegamos un día antes al lugar donde competimos, he podido visitar Nueva York y las cataratas del Niágara”, explica Aurembiaix. Lo que peor lleva es la comida.

“Hay dos cafeterías en la universidad y en la que puedes comer ensaladas no hay aceite de oliva y, en cambio, todo son salsas. En eso les llevamos mucha ventaja”, asegura. Ha hecho buenas amistades.

Su compañera de habitación, McKenzie Watt, estará unos días con ella estas Navidades en Balaguer.