El árbitro denuncia 'insultos' y 'amenazas' en La Seu

El colegiado que arbitró el pasado domingo el partido entre La Seu y Linyola, de Segunda Catalana, Adam Parra Cacho, redactó un anexo al acta en el que denuncia que a la salida de la instalación fue objeto de “insultos” y que vio su “integridad física en un alto peligro de ser agredido”, acusando de ellos a jugadores y directivos del equipo local, señalando en concreto al presidente Gregori Salmerón. Destaca también la ayuda que recibió del jugador de La Seu Ivan Vigo que, según redacta “separó al presidente de mi persona” y que le acompañó en todo momento separándole también de otras personas de las que se sintió amenazado. El club, por su parte, ha presentado alegaciones ya que, según explicaron fuentes de la directiva “el redactado del anexo no se ajusta a lo ocurrido” y niegan que el presidente estuviera involucrado en el incidente.

El partido finalizó con 1-2 para el Linyola. El anexo señala también que hubo lanzamiento de objetos en algún momento del partido y que al salir del campo la tripleta arbitral y pasar por la zona donde estaban los jugadores de La Seu “han aplaudido en señar de burla” y que también les insultaron, amenazándoles verbalmente de agresión. Añade que “en cuanto pararon de aplaudir e insultar una persona que posteriormente he podido identificar a través de fotos, con la ayuda de las redes sociales, como Gregori Salmerón” se le plantó delante y, además de insultarles, le agarró “del cuello con la mano izquierda y la derecha levantándola a pocos centímetros de mi cara, viendo mi integridad física en un alto peligro de ser agredido”.

En ese momento recibieron la ayuda del jugador Ivan Vigo, que les acompañó hasta su marcha. También denuncia que un auxiliar quiso agredirle, recibiendo de nuevo la ayuda de Vigo.Desde el club explicaron que “algunas cosas son ciertas, pero no todo lo que dice”, motivo por el que han presentado alegaciones. Fuentes de la directiva afirman que “se rió de nosotros durante el partido y faltó el respeto a nuestros jugadores” y que cuando a su salida le aplaudieron “se paró y mirándonos se rió.

Si hubiera seguido no hubiera pasado nada”. Las mismas fuentes afirman que el presidente no le insultó ni amenazó.