La pasión de un campeón

Adrià Albejano mantiene a sus 33 años la pasión por el trial. Una joven promesa de este deporte en su día, que se aficionó a esta modalidad motociclista tras tener como profesor al mítico Jordi Tarrés –siete veces campeón del Mundo–, no renunció a seguir practicando su deporte favorito a pesar de no poder dar el salto a la máxima categoría. “Disfruto mucho compitiendo”, explica, lo que no le impide mantener la máxima ambición.

El piloto de Alpicat cierra el 2022 como campeón de Catalunya en la categoría Promo (cuatro victorias en cinco pruebas), campeón provincial y tercero de España en la categoría TR4 (hizo cinco podios en siete carreras). “Ha sido un año muy positivo a nivel de resultados y aprendizaje y el año que viene seguiré luchando carrera a carrera para estar lo más arriba posible”, afirma. Albejano, que compite con el Motoclub Baix Berguedà y en la estructura Sherco Academy Oficial Tream, se inició en el trial en 2003.

“Jugaba a balonmano pero en 2002 hice un curso de trial con Jordi Tarrés y me enganché a este deporte. Empecé un poco mayor, pero me ha hecho disfrutar durante muchos años”. En 2016 llegó a competir en el Campeonato del Mundo Inter Class, firmando un primer puesto y un tercero en las dos carreras que hizo, pero dar el salto es muy complicado.

“Falta dedicación y dinero. El trial también es el patito feo del motociclismo, no hay tantos patrocinadores”, lamenta. “A los 18 años te tienes que plantear si pides un crédito y lo pruebas o si sigues estudiando, que es lo que hice.

Tengo compañeros que lo probaron y no lo consiguieron”.Pero sí decidió competir al máximo nivel posible. “En 2017 tuve una lesión en la rodilla derecha y ahora estoy en TR4, que es la máxima categoría amateur y no necesitas mochilero. Pero tiene también mucho nivel y, sobre todo, me permite disfrutar”.