FÚTBOL COPA DEL REY
Otra remontada blanca
El Madrid iguala el 0-1 en el 80 y sentencia en la prórroga a un Atlético que acabó con 10 || El Athletic gana en Valencia y la afición estalla contra Lim
Un Real Madrid con dos caras, sometido en el primer acto y desatado en el segundo, accedió cuatro años después a las semifinales de la Copa, tras su segunda remontada consecutiva en la competición, levantado de la lona con una genialidad de Rodrygo, que castigó la versión más valiente del Atlético de Madrid de Diego Simeone, que se despidió del torneo en inferioridad en la prórroga. La valentía de un Atlético que recuperó la convicción en el mejor escenario, contrastó de inicio con un Real Madrid que regresó de golpe a un reencuentro con sus limitaciones. Víctima en el primer acto de una derrota táctica de Ancelotti ante Simeone.
La jerarquía, el criterio con balón, las posesiones siempre productivas rojiblancas se pusieron en el espejo ante la impotencia defensiva y la imprecisión ofensiva madridista.Morata adelantó a los rojiblancos (0-1, 19’). Al Madrid le costó reaccionar y una vez más esperó a hacerlo en los minutos finales. Rodrygo empató (1-1) a diez minutos del final, para forzar la prórroga y, en el añadido, primero Benzema (2-1, 103’) y después Vinícius, muy aplaudido por su afición, (3-1, 121’), sellaron el pase a las semifinales.
Por otra parte, el Athletic volverá a jugar por cuarto año consecutivo las semifinales de la Copa del Rey tras superar por 1-3 al Valencia, equipo que la pasada edición le privó de llegar a la final y que ayer en Mestalla firmó un partido calamitoso. El Valencia trasladó a la Copa todos sus males de la Liga y les añadió la inoperancia ofensiva, una combinación letal para atisbar la más mínima opción de clasificarse ante un rival que jugó muy cómodo todo el partido. Muniain, Nico Williams y Vesga firmaron los goles del equipo bilbaíno.
Cientos de aficionados se congregaron en los aledaños del estadio de Mestalla a la conclusión del encuentro para protestar contra el máximo accionista del club, Peter Lim, y pedir por enésima vez su marcha. En los minutos finales los 45.000 aficionados ya mostraron su malestar con una pañolada, una sonora pitada y cánticos de ‘Peter, vete ya’. La afición siguió la presta en la calle, con gritos de“Peter, canalla, fuera de Mestalla”, “Gattuso es un gatito”, “Estamos hasta los huevos” o “No vais a salir”.
Si un derbi entre Madrid y Atlético ya es un duelo de alta tensión, en la madrugada del miércoles al jueves se añadió más leña con la aparición de un muñeco con la camiseta de Vinícius colgado de un puente junto con la pancarta ‘Madrid odia al Real’. Varios usuarios de las redes sociales comenzaron a compartir vídeos del lugar y pronto se hizo viral. El primero en salir a condenar los hechos fue el Atlético, que mostró su “enérgica condena” y aseguro estar “en contra de cualquier tipo de violencia e insulto”.
“El Atlético de Madrid siempre ha condenado y condena cualquier tipo de expresión violenta que altera la sana rivalidad en la ciudad entre las dos aficiones”, escribió el club colchonero. El Real Madrid emitió un comunicado agradeciendo las muestras de cariño recibidas “tras el lamentable y repugnante acto de racismo, xenofobia y odio” contra Vinícius. También LaLiga y la RFEF se sumaron a la condena.
Por su parte, la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte se reunirá el lunes “de manera extraordinaria”, tras los “deleznables episodios violentos que siguen sucediéndose en el entorno deportivo y social”, según un comunicado del CSD.