El Cadí la Seu pierde en el último cuarto el partido ante Perfumerías Avenida (63-47)

El Cadí La Seu dio la cara, tuteó al vigente campeón de la Liga Femenina durante más de tres cuartos, al que puso en aprietos por momentos, pero acabó sucumbiendo por sus propios errores (63-47). Las pérdidas (20) y el desacierto (5 de 22 en triples) fueron demasiado lastre ante un rival de la talla del Perfumerías Avenida, que no cerró el partido hasta el final, después de un último parcial demoledor, 22-7. La baja de Laura Peña por unos problemas en la espalda, reservada dado el calendario que le viene al Cadí, fue un lastre más para las leridanas, que echaron en falta la aportación de jugadoras como Stephanie Watts o Laia Raventós.

Pese a tener a una de las pívots más determinantes de la Liga, la checa Julia Reisingerova, el Perfumerías Avenida lo apostó todo al triple y le salió bien en un primer cuarto con mucho acierto exterior. La canasta inicial de Tunstull tuvo una respuesta inmediata de Carleton con dos canastas seguidas desde la línea de 6,75. La salmantinas anotarían tres canastas más de tres que les permitió irse con una máxima renta de siete puntos (19-12, m.9), obligando a Jordi Acero a parar el partido.

Se rehízo el Cadí La Seu y cerró el cuarto con una canasta de Júlia Soler y abrió el segundo acto con otra de Jewel Tunstull, apretando de nuevo el luminoso (19-16). El Perfumerías Avenida seguía insistiendo desde la larga distancia, pero esta vez con mucho menos acierto. Aun así, logró recuperar los siete puntos de renta de inicio (23-16, m.14), pero las urgelenses reaccionaron enseguida y devolvieron el golpe con un parcial de 0-5 (23-21, m.16).

Los últimos minutos antes del descanso fueron un cúmulo de desaciertos por ambos bandos, en especial del Cadí. Dos de sus referentes no estaban entrando en juego, con Raventós errando todos sus lanzamientos y Watts negada en el triple lo que, unido a la baja de Peña, era demasiada ventaja ante todo un Perfumerías. Pese a todo, el equipo del Alt Urgell llegó vivo al intermedio, perdiendo solo de seis puntos (29-23) después de un segundo cuarto paupérrimo en cuanto a anotación (10-9).La segunda parte arrancó con el Cadí más entonado, con Tunstull haciendo daño en la pintura y Watts anotando su primer triple de la noche (32-30).

Pero ahí se atascaron las urgelenses, muy erráticas, y el Avenida lo aprovechó para endosarle un parcial de 6-0 y alcanzar su máxima renta, ocho puntos (38-30, m.26), obligando de nuevo a Jordi Acero a pedir tiempo muerto. El Cadí no se vino abajo y con una canasta de gran clase de Bahí y un 2+1 de Raventós volvió al partido (38-35). Pepe Vázquez paró el juego, pero no pudo evitar que las leridanas igualaran el duelo a 38, a tres minutos para cerrar el cuarto.

Tuvieron varias opciones para darle vuelta al marcador y ponerse por delante, pero la precipitación y el poco acierto en el triple lo evitaron.Pese a todo logró entrar en el asalto definitivo perdiendo solo de un punto (41-40) y ante un rival que no se encontraba nada cómodo ante la defensa impuesta por las urgelenses. Tras un inicio con intercambios de golpes, el Avenida recuperó seis puntos de ventaja (51-45) y Acero paró de inmediato el partido. No quería que se le fuera, pero esta vez no lo logró.

De vuelta, un 2+1 de Vilaró elevó la renta hasta los nueve tantos (54-45), la máxima del partido, que ya no paró de crecer.Las leridanas se precipitaron mucho en sus ataques, perdiendo la friolera de 20 balones y con una efectividad por los suelos. Además, el Avenida aprovechó que Tunstull estaba cargada de personales, puso balones interiores a Reisingerova para que la checa anotara con facilidad, dejando el partido visto para sentencia después de un último parcial para olvidar, 22-7, cerrando el partido con la máxima desventaja en todo el partido, 16 puntos (63-47), totalmente irreal dado lo visto.

Acero: “Con el 49-45 se nos ha acabado la energía”

Jordi Acero se mostró contento con la imagen que dio su equipo ante el vigente campeón, al que batió en la primera vuelta en La Seu, pero lamentó la falta de acierto al final.

“Después del parón veníamos a una pista complicada como es la del Perfumerías Avenida, con un gran ambiente, pero hemos hecho un buen partido en líneas generales, compitiendo ante un gran equipo. Es verdad que los cambios defensivos que nos ha planteado Avenida nos han impedido encontrar nuestro feeling en ataque y poder correr. Cuando lo hemos logrado le hemos hecho sufrir, como ya hicimos en casa en la primera vuelta, estando muy bien en el rebote defensivo y en el cuerpo a cuerpo.

Pero con el 49-45 creo que se nos ha acabado la energía y la fluidez. La lectura del juego y la eficacia han bajado y hemos perdido demasiados balones gratuitos. Aquí Avenida ha podido romper el partido, pero creo que merecíamos irnos con un resultado más ajustado que los 16 puntos finales”, señaló.