Marta Visa, récord estatal de esquí de velocidad con 203,24 km/h

“Ya formo parte del club de los 200, no lo puede decir mucha gente. Y en solo tres temporadas”, advierte sonriente la leridana Marta Visa Carol, que la pasada semana batió el récord de España de esquí de velocidad, que ella misma poseía, al alcanzar los 203,24 km/h en la Copa del Mundo que se disputa en la estación de Vars, en los Alpes franceses. Superar esa barrera de los 200 km/h supone en el esquí de velocidad, también llamado KL (Kilómetro Lanzado), pertenecer a la Fórmula uno de este deporte, la que llaman S1. La otra categoría es la S2, en la que la esquiadora de Bellver de Cerdanya debutó en 2021 con 39 años. No hay categorías por edades. De pequeña, Visa competía internacionalmente en la modalidad de los ‘bumps’ (baches), dentro del esquí acrobático, hasta que desde la federación le animaron a hacerlo en la de velocidad.

“Nací con unos esquís por decirlo así, ya que en el parvulario, con tres años, ya nos llevaban a la nieve, y a los 12 ya competía. Ahora, con 41 años, disfruto viajando y me permite socializar con gente de todo el mundo”, argumenta. Es un deporte de alto riesgo en el que los esquiadores aceleran de 0 a 100 km/h en 4,5 segundos, equivalente a la aceleración de una MotoGP o un F1. “Es normal que tengamos miedo con velocidades de 200 km/h, pero a la vez te da sensaciones muy placenteras. En mi caso me da un estado emocional de felicidad, es algo muy adrenalítico”, afirma la única mujer de los tres componentes del equipo español RFEDI. Marta regresó a la competición en enero, tras estar prácticamente un año parada por una caída. En Vars durante el Mundial de 2022 sufrió un aparatoso accidente en el momento de desaceleración, acabó impactando con virulencia contra las redes de protección de la pista de Chabrières y sufrió una rotura de omoplato y diversas contusiones.

“Aún me queda alguna secuela en el brazo derecho. Me afectó a la arteria braquial y por poco no pierdo el brazo. Me llevé por delante varias estacas. Por eso apenas coincidimos medio centenar en las competiciones internacionales. Ha habido accidentes muy graves. Solemos decir que hay dos tipos de corredores. Los que se la han dado y los que se la van a dar”.

Solo siete personas han conseguido esquiar a más de 250 km/h. Tanto el récord mundial masculino como el femenino está en manos italianas: Ivan Origone (254,958 km/h) y Valentina Greggio (247 km/h). El récord estatal masculino lo posee Ricardo Adarraga (240,642 km/h), con sus 58 años. Sin ayudas aerodinámicas como alerones o el casco, con el traje plastificado no sería posible.

“La verdadera sensación de velocidad la tienes cuando ya estás frenando, levantas el cuerpo y abres los brazos”, señala Marta. Hay quien dice que bajar esos 800 metros de una extrema inclinación es como “freírse en una sartén”. Fue deporte de exhibición en Albertville’92, pero no es olímpico. Pocos practicantes y muy caro. Marta Visa se costea el material y las competiciones gracias al apoyo de la RFEDI y sus patrocinadores como Scuderia Ramilo. Marta, que fue ejecutiva de Pirelli, es responsable de promoción económica en el consell comarcal del Alt Urgell y es profesora universitaria en la Ramon Llull.