Vía crucis en el Barris Nord

El ICG Força Lleida encajó ayer la segunda derrota de la temporada en el Espai Fruita-Barris Nord al caer por 77-88 ante un TAU Castelló más sólido y efectivo, que ha sido capaz de ganar a los leridanos en ambos partidos. El pésimo acierto en el tiro de tres puntos (8 de 37) y el dominio del rebote visitante durante los tres primeros cuartos acabó sentenciando un duelo que ya se empezó a torcer en el primer cuarto. Aunque pareció reaccionar, el ICG Lleida nunca tuvo opción de remontar.

Gerard Encuentra comenzó el partido con un cinco novedoso, sobre todo por la presencia de Bakovic y Faye, los dos últimos en llegar y que estrenaban ayer titularidad, junto a Brito y González en las alas y Marcos fijo en la dirección, otra vez solo en esas funciones dada la baja por lesión de Rafa Villar, que tiene para una semana más como mínimo. La apuesta le salió bien al técnico, ya que el croata capturó dos rebotes ofensivos e inauguró el marcador con dos tiros libres (sería lo único que aportaría), y el senegalés se adueñó del rebote defensivo y aportó cuatro puntos para ser el más valorado antes de ser sustituido (ya no tuvo continuidad), con el duelo empatado a 11 ya superado el ecuador del primer periodo. Un triple de Marcos situó de nuevo a los leridanos en ventaja (14-11), pero el Castelló sacó provecho de su mayor físico y acierto exterior para endosarle un parcial de 2-12 y conseguir la máxima renta, siete puntos (16-23), obligando a Encuentra a parar rápidamente el partido.

No mejoró el equipo en la reanudación porque Dijkstra, con su segundo triple consecutivo, situaba la desventaja en diez puntos al cierre del cuarto (16-26).El segundo asalto comenzó con una técnica sobre el entrenador leridano por protestar el criterio arbitral con las faltas y que no hizo otra cosa que elevar la renta hasta los 11 puntos, una máxima que los castellonenses lograron mantener hasta que el ICG Lleida reaccionó de la mano de Marcos. Un parcial de 7-0 obligó a Orenga a pedir tiempo muerto (25-29) y el cuadro castellonense reaccionó desde la línea de 6,75 (firmó un espectacular 9 de 17 al descanso), donde López y Alvarado estuvieron infalibles para recuperar los nueve puntos de renta (28-37). El ICG Lleida estaba siendo superado en todo, sobre todo en intensidad y acierto, y solo resistía gracias a un Marcos estelar.

El argentino, autor de 15 puntos en este segundo asalto, evitó que la herida fuera aún mayor que los ocho tantos de desventaja que reflejó el tanteador al descanso (41-49), un mal menor visto lo visto.Mucho tenía que cambiar el Força Lleida en la segunda parte si quería tener opciones de darle la vuelta al partido, pero la puesta en escena de inicio no invitaba a eso. Fue un tercer cuarto para olvidar de los leridanos, negados en ataque y muy blandos en defensa, permitiendo segundas y terceras opciones a un Castelló que, pese a las importantes bajas que traía, puso la directa y llegó a dominar por 17 puntos (44-61, m.24), tras un parcial de 3-12. Dijkstra y Stutz estaban haciendo añicos al Força Lleida, que solo lograba replicar con acciones de Marcos.La solidez defensiva y su acierto en los tiros libres permitieron al Castelló entrar en el último asalto con su máxima renta, 18 puntos (53-69), que supo manejar a la perfección.

El Lleida reaccionó, como no podía ser de otra manera y logró situarse a ocho en dos ocasiones, la última a dos minutos del final (73-81), pero no le dio para más y acabó cediendo su segundo partido en casa. Gerard Encuentra asumió la derrota como merecida y felicitó al Castelló porque “ha sido mejor que nosotros en el general de todo el partido”, dijo, aunque lamentó el juego de ayer de sus hombres pese a un buen arranque que, según explicó, al final fue contraproducente. “Hemos empezado bien los primeros cinco minutos, anotando fácil, y eso nos ha penalizado porque no hemos entendido el partido, nos ha dado cierta relajación”, señaló, para añadir: “en los minutos finales han sido muy superiores, corriendo, robando balones y controlando el ritmo.

De hecho, han controlado el ritmo durante todo el partido, y cuando nosotros vamos al ritmo del rival nos cuesta mucho”. El técnico leridano también se quejó de la defensa, muy blanda y permisiva. “En la primera parte nuestro nivel defensivo ha sido bajo, con muchos errores.

Ha sido un típico partido de LEB, que juegas en casa, estás a 10 y parece que te vas a meter, pero ellos han controlado muy bien, han jugado con el marcador y con el tiempo. Sí que es verdad que hemos tenido algún arreón en algún momento que parecía que nos podía meter en el partido, pero hoy no era el día, porque incluso hemos tenido varios tiros liberados que no nos han entrado. Exceptuando los cinco triples que ha anotado Juani (Marcos), el resto del equipo solo ha metido tres, fallando acciones muy fáciles debajo de la canasta y regalando faltas”, declaró.

Encuentra incidió en la actuación de la tripleta arbitral, concretamente en uno de sus integrantes. “El tema de las faltas es otro capítulo, porque me gustaría analizar todas las faltas que ha pitado David Checa, porque creo que ha ido deliberadamente contra nosotros”, sentenció. Por su parte, Juan Antonio Orenga se mostró muy satisfecho con la victoria, sobre todo, por las bajas que acumulaba el equipo.

“Era un partido muy complicado para nosotros por las 4 bajas que teníamos, por eso sabíamos que teníamos que controlar el ritmo y complicarles su ataque, y lo hemos conseguido. Sabíamos que Marcos iba a hacer sus números, pero nuestro objetivo era que los demás no salieran de su cuota”, señaló.