FÚTBOL TERRITORIAL
Posible baile de descensos en el fútbol leridano
La pérdida de categoría de Balaguer y Alpicat podría arrastrar al Pardinyes a Tercera para compensar grupos | La situación se evitaría si un cuarto equipo leridano de Segunda asciende a Primera
Tras los descensos de Balaguer y Alpicat a Segunda Catalana este pasado fin de semana, un equipo de la territorial sale como el principal perjudicado: el Pardinyes. El equipo de la capital del Segrià es el peor de los cuatro penúltimos clasificados en los grupos de salvación de Segunda Catalana y podría perder la categoría como descenso no compensado. Aunque dicha situación debería confirmarse con la aprobación del nuevo plan de competición, también provocaría un descenso automático a Cuarta de su filial, que juega en Tercera.
En cualquiera de las dos circunstancias, incluso si el Pardinyes no acaba descendiendo, la Tercera leridana quedaría con 31 equipos, y el plan de competición prevé a 32, para hacer dos grupos de 16. Así, el mejor situado para completar la categoría sería el Gimenells, segundo en Cuarta. Sin embargo, el posible descenso del Pardinyes se evitaría por completo con el ascenso del cuarto clasificado del grupo leridano de Segunda Catalana.
Tras los ascensos de Artesa de Lleida y Borges, en la última jornada, el Alguaire, actualmente tercero con 53 puntos, se jugará la última plaza de ascenso directo con el Artesa de Segre (51) y el Guissona (50). Los tres tratarán de evitar una cuarta plaza con interrogantes y a la que también podría acceder el Linyola. Según el plan de competición, suben a Primera Catalana los tres cuartos clasificados con mejor coeficiente de puntuación entre los seis grupos de Segunda. Antes de la última jornada, el Artesa de Segre, tiene el cuarto mejor coeficiente, empatado con el tercero, el Sant Ildefons del grupo 3, pero por detrás por el average general.
Sin embargo, se podrían abrir más plazas de ascenso por dos escenarios aún sin definir. El primero es la posible reestructuración de la Tercera RFEF, con el paso de 16 a 18 equipos. Dicha circunstancia abriría un hueco más en Primera Catalana, que iría para el cuarto mejor coeficiente entre los cuartos clasificados, e incluso el quinto mejor cuarto clasificado subiría a Primera si el Sant Andreu asciende este domingo a Segunda RFEF.