La RFEF propone una reforma de Tercera RFEF con 18 equipos

En la reunión de los presidentes de las Federaciones territoriales de inicios de mes, se aprobó por amplia mayoria el aumento de 16 a 18 equipos en Tercera RFEF, un hecho que salvaría a dos equipos a priori descendidos en dicha categoría y que provocaría más ascensos en las categorías inferiores. Ahora mismo los equipos catalanes que se salvarían serían el Badalona y el Vilafranca, si el Sant Andreu no logra el ascenso a Segunda RFEF, o el Badalona, Vilafranca y Vilassar, si dicho ascenso sí se produce. Estos equipos serían rivales del Mollerussa, recién ascendido a la categoría y que deberá esperar hasta el 26 de junio, cuando se reunirá la Comisión Delegada de la Federación Española, para saber definitivamente sus rivales. En dicha reunión se deberá ratificar el nuevo formato de competición, que afectaría en primera persona al equipo del Pla d’Urgell y puede alterar también a varios equipos del fútbol territorial leridano.

El cambio de 16 a 18 equipos deberá aprobarse en la Comisión Delegada del 26 de junio

Más allá de eso, el Mollerussa deberá adaptarse a las normas reguladoras de la categoría, que también se tendrán que aprobar en verano, pero que presentarán diferencias respecto a lo que se exige en la Primera Catalana. La Federación, el organizador de la competición, exigía para la presente temporada disponer de un presupuesto mínimo de 80.000 euros a todos los clubes de Tercera, además de tener un campo con césped natural, o bien artificial de última generación con una antigüedad máxima de 8 años. A efectos de plantilla, el equipo podrá tener un máximo de 22 fichas del primer equipo, aunque solo 16 de ellas podrán ser de jugadores mayores de 23 años y el resto se deberán completar con futbolistas sub-23. A diferencia de lo que pasa en Segunda RFEF, en las bases de competición de Tercera no se exigían un mínimo de contratos profesionales en la plantilla, aunque el Mollerussa deberá asumir alguno para la próxima campaña.