ATLETISMO MUNDIAL DE BUDAPEST
El español García Romo, sexto en la final de los 1.500, la prueba estrella
El británico Kerr batió al favorito Ingebrigtsen
El atleta español Mario García Romo firmó un sexto puesto ayer en la final de 1.500 del Mundial que se está disputando en Budapest, mientras que las tres españolas del 3.000 obstáculos se quedaron fuera de la final en el National Athletics Centre. El 1.500 fue uno de los momentos álgidos de la jornada con los ojos puestos en Jakob Ingebrigtsen. El noruego dominó casi toda la carrera pero en la última curva, el británico Josh Kerr apretó hasta sorprender al favorito.
Como el año pasado ante otro inglés como Jake Wightman, Ingebrigtsen se quedó sin el oro mundial en el 1.500. El resto sufrió un alto ritmo, como un García Romo bronce europeo y cuarto el año pasado en la cita mundial de Eugene que lo peleó en la última vuelta. El salmantino, superviviente estatal después de las eliminaciones de Mo Katir y Adel Mechaal, se vio en la parte trasera de la carrera sin poder ganar posiciones hasta los últimos 200 metros, donde alcanzó la sexta plaza, a cuatro décimas del podio que completó el también noruego Narve Gilje Nordas.Por otro lado, las eliminatorias del 3.000 obstáculos dejaron fuera a la representación española en la capital húngara.
Marta Serrano, la atleta más joven de España en el Mundial, hizo su debut con desparpajo y fue novena con 9:31.82 (su tercera mejor marca de siempre). Después le tocó a la sevillana Carolina Robles, octava con 9:34.41, mientras que a Irene Sánchez-Escribano le sobraron dos vueltas para culminar con el grupo de cabeza, novena (9:31.97). Mientras, Budapest volvió a frustrar a María Vicente, quien se quedó a 2 centímetros de la final en longitud y ayer tuvo la misma mala fortuna en triple, tras el último salto de la estadounidense Franklin.