BALONCESTO ACTIVIDADES
El básquet de Lleida pide que haya respeto en los partidos
Iniciará en 153 encuentros del fin de semana la campaña 'Animar no és corregir'
El baloncesto leridano está decidido a acabar con los malos modos, los gritos y los insultos, y fomentar el respeto y el juego limpio en los partidos de todas las categorías. Por eso, la Representación Territorial de Lleida de la Federació Catalana de Basquetbol pondrá en marcha toda una serie de iniciativas durante esta temporada que se iniciarán este fin de semana con la campaña ‘Animar no és corregir’, donde pretenden poner de relieve que “si no hay respeto, nos olvidamos de aplaudir y nos olvidamos de enseñar”, según comentó ayer en declaraciones a este diario Ingrid Solé, presidenta del comité técnico y directiva de la RT de la Federació Catalana de Basquetbol.
Solé explicó que esta campaña “va dirigida a todos los miembros que conforman la familia del baloncesto. Desde jugadores y jugadoras hasta los árbitros pasando por los integrantes de cualquier estamento de los clubes y, evidentemente, también el público”.
La iniciativa, que se pondrá en marcha en los 153 partidos que se disputarán este fin de semana en los pabellones de toda la provincia, consistirá en un espot publicitario en el descanso de los encuentros a través de la megafonía, así como la colocación de un cartel que recordará a los asistentes que es obligación de todos animar, entrenar, jugar y arbitrar, según sea su rol, con empatía y deportividad. “Sería ideal no tener que pedir este respeto, pero desgraciadamente lo consideramos necesario”, señaló Ingrid Solé. “Cuando pasan estas cosas, los niños no están pendientes del partido sino de la grada. Y algunos padres solo ven los partidos, no les interesa si los niños están evolucionando y se lo pasan bien practicando este deporte”, añadió Solé.
Esta iniciativa, pionera en el baloncesto catalán, es elogiada y aplaudida por los expertos. El psicólogo deportivo, profesor de Inefc Lleida y exjugador de baloncesto, Àlex Gordillo, cree que “la clave de todo radica en que cada cual asuma el rol que le corresponde”.Para Gordillo, “el conflicto llega cuando los roles no se respetan. El modelo de deporte competitivo de alto rendimiento a todos nos gusta, pero es totalmente diferente al deporte de formación. Los padres y madres están siendo muy invasivos en el deporte como también lo son en la escuela. Su papel debe ser animar y nada más. Los hijos no serán lo que nosotros queremos. Deben aprender a gestionar la frustración y tomar decisiones porque es lo que se encontrarán en la vida”, concluyó Gordillo.