FÚTBOL TERRITORIAL
Lesión física y laboral
Antonio Pérez, del Alcoletge, se rompió los ligamentos y el menisco de la rodilla y no pudo coger la baja al ser autónomo
Ha aplazado a febrero su operación
“Es el dolor más fuerte que he sentido en mi vida, pero lo peor es que tengo un negocio en el que soy el único trabajador y no puedo coger la baja porque no me sale a cuenta. Y no me puedo operar, tendré que hacerlo el próximo año”. El testimonio de Antonio Pérez, futbolista del Alcoletge que sufrió en pretemporada, un miércoles ante el Juneda, la rotura del ligamento cruzado y del menisco, una de las más graves lesiones que puede tener un deportista y que en el caso de los amateurs se agrava, ya que pone en riesgo incluso su vida laboral.
A Antonio se le vino el mundo encima cuando en un amistoso antes de comenzar la Liga de Tercera Catalana, en un salto al disputar un balón con un rival, le falló la rodilla. “Noté un chasquido y que la rodilla se me partía en dos piezas. Sentí que me había roto”, explica. Propietario de una tienda de ropa en Lleida estuvo un mes ayudándose al caminar con muletas y durante dos semanas tuvo que recurrir a familiares y a su pareja para que le atendieran el negocio. “Un trabajador normal coge la baja, pero si yo lo hago y me dan 600 euros al mes cuando tengo que pagar 300 por ser autónomo, pues la verdad no me sale a cuenta”, señala.Aunque el seguro médico obligatorio que la Mutualidad de la Federación Catalana ofrece a sus afiliados garantiza la máxima cobertura para el tratamiento y la recuperación de cualquier lesión producida practicando fútbol, para Antonio Pérez es insuficiente. Su reflexión es que “los futbolistas amateurs deberíamos tener un seguro médico completo para que pudiéramos coger la baja en condiciones. No somos futbolistas profesionales y si ese seguro nos ayudara a pagarlo el club o la propia federación, lograríamos tener una cierta estabilidad económica durante el periodo de baja. No hay tantas lesiones de cruzados en una temporada, así que es algo que debería explorarse”, argumenta Pérez.Formado en el Pardinyes y después de haber jugado en Atlètic Segre, Lleida, Sudanell e, incluso, en la cantera del Charlton inglés, ha dicho adiós a la que era su segunda temporada en el Alcoletge. Y quien sabe si también a su carrera con solo 25 años. “Quizás me pueda operar en febrero. La rehabilitación tardará mucho más que un profesional y no sé si me valdrá la pena volver a jugar”, concluye.