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Victoria con coraje

El ICG Força Lleida se estrena tumbando al Gipuzkoa pese a las numerosas bajas

La defensa y un parcial de 18-2 en el último cuarto resultaron decisivos

Els equips femení i masculí del club van oferir les Lligues Catalanes guanyades a l’afició.

Los equipos femenino y masculino del club ofrecieron las Lligues Catalanes ganadas a la afición. - JAVI ENJUANES

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REDACCIÓN

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Que nadie dé por muerto nunca a un equipo de Gerard Encuentra porque lo pagará caro, como ayer le pasó al Gipuzkoa (75-68). Pese a las bajas de tres de los puntales del equipo y con dos recién llegados que apenas han podido entrenar, el ICG Força Lleida dio ayer cuenta de una de las revelaciones de la temporada pasada para estrenarse con victoria en el arranque de la LEB Oro, una victoria basada en una gran defensa, la fe en el triunfo y a un parcial de 18-2 en el último cuarto que noqueó por completo a su rival.

Gerard Encuentra tuvo pocos problemas a la hora de escoger el primer cinco inicial de temporada, y es que mirando el banquillo pocas alternativas le quedaban. 

Solo tenía a siete jugadores de la primera plantilla disponibles más los dos recién llegados, así que apostó por un quinteto eminentemente defensivo, con sus dos directores de orquestra, Villar y Varela, Matulionis y Cuéllar alternándose en el 3 y el 4, algo que hicieron durante todo el partido, y Kuath de cinco puro. Las cosas no empezaron mal para el conjunto leridano. Pese a evidenciar una lógica falta de cohesión –las lesiones y la falta de jugadores no han permitido hacer una pretemporada idónea–, los locales tomaron el mando desde el inicio gracias, sobre todo, a las penetraciones de Rafa Villar, que imponía su físico sobre sus marcadores. 

Seis puntos fue la renta que logró el ICG Lleida sobre el ecuador del primer periodo (11-5), que el Gipuzkoa logró remontar al final (15-17).En ese momento Gerard Encuentra ya había hecho debutar a Quintrell Thomas, que pasó desapercibido (su físico no le da, por ahora, para jugar muchos minutos), y entrado el segundo cuarto hizo lo propio con Simeunovic, que tampoco mejoró las prestaciones del neoyorquino. Los tiros libres y la irrupción de Jaume Lobo, con seis puntos casi seguidos, permitieron al Força Lleida volver a tomar el mando con la máxima ventaja hasta ese momento, siete puntos (31-24), obligando a Odriozola a parar el partido.El tiempo le fue de maravilla a los donostiarras, que con dos triples de Martínez, ayudado por una defensa blanda y dos malos ataques de los locales, redujeron de nuevo las diferencias (31-30), que se quedaron en cuatro puntos al descanso (36-32).

En la reanudación, el ICG Lleida se mantuvo con ventaja durante más minutos, pero sin llegar a despegarse. Volvió a tener seis puntos de renta sobre el ecuador del tercer asalto (45-39), pero un parcial de 0-9 permitió a los gipuzkoanos darle la vuelta (45-48, m.27). Fue por poco tiempo, el que tardó en activarse un Diogo Brito que empezó su exhibición, y eso que el miércoles sufrió un fuerte golpe en la nariz. El portugués dio ese paso adelante –o dos– que se le reclama en su segunda temporada en Lleida y con dos triples puso a raya al Gipuzkoa al final del periodo (55-51).Pero ahí no quedó la cosa. Después de que otro triple de Martínez, el tercero de la noche, pusiera otra vez por delante a su equipo, Brito volvió a tomar los galones y dinamitó el partido con dos triples consecutivos (60-58). Odriozola tuvo que parar el partido, pero esta vez no encontró soluciones. Kur Kuath tomó el relevo y con tres canastas seguidas más otra del luso situaron la renta por encima de la decena de puntos (71-60), obligando de nuevo al entrenador donostiarra a pedir tiempo (71-60, m.36).

 La sangría aún se hizo más grande con cuatro tiros libres seguidos de Lobo que elevaron la ventaja hasta los 15 puntos (75-60), completando un parcial de 18-2 en poco más de cinco minutos. El partido estaba ya roto y pese al arreón del Gipuzkoa, solo logró maquillar el resultado, pero no pudo evitar una victoria de muchos quilates de un ICG Força Lleida que llegaba casi desahuciado por las lesiones.

Has cinco jugadores estuvieron en dobles dígitos de anotación y otro rozándo la decena

Gerard Encuentra no pudo más que felicitar a sus jugadores por el enorme esfuerzo que hicieron y que tuvo la recompensa de la victoria. “Solo me queda felicitar a los chicos por esta trabajada victoria, con todos los inconvenientes con los que afrontábamos el partido. Hemos tenido muy claro lo que teníamos que hacer, que era vaciarnos, darlo todo en la pista, y la mayor parte del partido ha sido así. El encuentro nos requería un esfuerzo mental y físico, especialmente en el trabajo defensivo, y en ese aspecto durante casi todo el partido hemos estado muy bien, dejando a Gipuzkoa en solo 68 puntos”, explicó el técnico, para añadir: “sí que es verdad que en algunos momentos nos ha faltado anotación para que el marcador no estuviera tan ajustado, pero en el momento en que hemos tenido ese acierto, esa inspiración de Diogo, hemos conseguido abrir una brecha y hemos controlado el partido”.

Preguntado por la labor de Kur Kuath, comentó: “sabíamos de su calidad, de lo que nos podía dar, y ha hecho un buen partido, habrá otros en los que no lo estará tanto, pero de lo que se trata es de ayudar y ahora mismo con la lesión de Marvin (Ogunsipe) era el único interior puro y está haciendo un esfuerzo muy grande, adaptándose a lo que el equipo le pide y estoy contento, no solo con él, sino con todos, porque esto es un trabajo de todos”.Encuentra destacó que “tiene mucho mérito esta victoria, porque estamos hablando del Gipuzkoa, que tiene un gran equipo. Hay que darle valor. Al final nos ha costado por momentos pero ganar da mucho valor. Los chicos han entendido que hoy se trataba de vaciarse, de darlo todo en la pista, y cuando lo das todo la gente lo ve, te anima y cuando vamos juntos de la mano con el Barris Nord pasa eso, que tenemos ese momento de brillantez y lo aprovechamos”.

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