DEPORTES
Primer tropiezo
El ICG Força Lleida pelea en la cancha del San Pablo, pero termina cediendo
La energía se fue acabando, aunque hubo opciones hasta los últimos 3 minutos
El ICG Força Lleida encajó ayer la primera derrota de la temporada, tropezando en la pista del San Pablo (79-66). Los de Gerard Encuentra tuvieron opciones hasta los últimos tres minutos, pero la falta de energía por la ausencia de rotación provocó malas decisiones en los momentos calientes y también errores que desembocaron en un marcador demasiado amplio.
El partido arrancó al ritmo de Lobo, autor de los 8 primeros puntos del ICG Força Lleida. El conjunto de Encuentra dominó y alcanzó una renta de 7 puntos (5-12), antes de las primeras rotaciones. Simeunovic, que estrenó titularidad, fue el encargado de establecer la máxima diferencia con un triple (9-17) y Lolo Encinas no tuvo más remedio que pedir su primer tiempo muerto. Reaccionó ligeramente el San Pablo, que tuvo en los árbitros a su mejor aliado durante el final del primer cuarto. Faltas y más faltas que llevaron a los locales a la línea de tiros libres y recortar diferencias (19-22). Encuentra ya se había llevado la primera advertencia de técnica.
El esperpento arbitral siguió en el inicio del segundo parcial, con una antideportiva de Simeunovic que facilitó que los burgaleses se pusieran por delante por primera vez (25-24). Pero el ICG Força Lleida siguió a lo suyo y, con un parcial de 0-7, retomó el mando y envió el duelo a un nuevo tiempo muerto de los locales (25-31). Apareció Varela en los momentos clave de la primera mitad y los leridanos llegaron de nuevo a los 8 puntos de margen (29-37), antes de una respuesta de Lapornik en forma de triple. No estuvo fino el equipo de Encuentra en la gestión de los últimos minutos del primer acto y el San Pablo lo aprovechó para volver a ajustar el luminoso del Coliseum (35-39).
Cuatro faltas en contra en un minuto dieron paso a los mejores momentos por parte de los locales, que, con un parcial de 11-0 dejaron muy tocado al ICG Lleida (48-42). Encuentra tuvo que parar el duelo y los leridanos se recuperaron de la mano de Villar, encargado de empatar el duelo de nuevo (50-50). Pero el San Pablo sacó a relucir su mayor calidad individual para cerrar el tercer cuarto con una máxima diferencia de 7 puntos (59-52). Los burgaleses siguieron dominando en el arranque del último cuarto, manteniendo 8 puntos de diferencia. Pero el ICG Força Lleida llegó a ponerse a solo 4 (70-66) a falta de 3 minutos para el final después de un tiro libre de Kuath. Pero al pívot se le acabó la energía y erró los siguientes tres ataques, el último un mate estratosférico que salió rebotado del aro.
No dejó escapar la oportunidad el San Pablo, que con un triple de Jiménez dejó el duelo sentenciado (77-66) a falta de 48 segundos. Hubo tiempo muerto de Encuentra para intentar maquillar el resultado, pero también se le fundieron los plomos a Lobo. Fischer cerró el partido con la máxima renta local de 13 puntos, un castigo demasiado duro para un ICG Força Lleida que peleó el partido y que tuvo opciones de dar la sorpresa.
Un parcial final de 9-0 aumentó la renta a favor de los locales, que nunca tuvieron el control
“No hemos sabido jugar los minutos finales, el partido ha estado muy igualado, mandando nosotros hasta la media parte”. Así resumía Gerard Encuentra el partido. La primera parte del conjunto leridano fue de gran nivel maniatando a un San Pablo Burgos que fue a remolque. “Hasta la media parte hemos perdonado ganando solo por 4, pero mi sensación es que dominábamos el ritmo y jugábamos mejor”.
El partido se torció en la reanudación, los leridanos no pudieron mantener el nivel defensivo, y eso unido al poder del silbato del trío arbitral decantó el cuarto en favor de los locales. “Han tirado 11 tiros libres en el tercer cuarto y 28 puntos, pero la sensación, aun así, es que estabamos ahí”, declaró el técnico leridano, que lamentó que “nos ha condicionado en el tercer cuarto la acumulación de faltas y la falta de rotación”. Eso sí, una vez superado ese tercer cuarto y viéndose todavía en el partido el equipo, las sensaciones del técnico leridano eran claras: “Ellos han tenido jugadores que a la hora de la verdad han sido capaces de resolver el partido”.
La falta de acierto en tiros sencillos acabó hundiendo al equipo que defensivamente en el último cuarto sí que dio la talla: “Hemos fallado cosas muy fáciles en los últimos cinco minutos y Lapornik no ha fallado”. “Me voy pensando que nos ha faltado saber jugar mejor los ultimos cinco minutos de partido, y a lo mejor, alguna rotación más”, añadió Encuentra.La falta de acierto en los últimos minutos y la poca rotación debido a las faltas condenó al equipo de Encuentra que, eso sí, pese a la derrota valoraba positivamente la actitud del equipo y las opciones del mismo en una cancha tan difícil como la de Burgos. “El equipo ha hecho un buen trabajo, queriamos ganar, hemos estado cerca viendo los nervios de San Pablo”.