Las fichas de fútbol femenino en Lleida crecen un 70% en 4 años y ya son 1.070

El fútbol femenino sigue creciendo a pasos agigantados, impulsado por los continuos éxitos del Barça femenino, con la consecución de su segunda Champions en junio pasado, con el posterior triunfo de la selección española en el Mundial y el galardón, por tercer año consecutivo, del Balón de Oro para una futbolista catalana: Aitana Bonmatí, tomando el relevo de Alexia Putellas, ganadora de los dos anteriores.

Con estos éxitos, las jugadoras se están convirtiendo en referentes y están impulsando una gran expansión, que también es claramente palpable en Lleida. En solo cuatro temporadas y con una pandemia de por medio, las licencias femeninas en la demarcación han pasado de 633 en la temporada 2019-20 a las 1.070 con las que se arrancó esta campaña, lo que representa un aumento de casi el 70% (concretamente, el 69%).

Eso se traduce también en un gran crecimiento del número de equipos. Actualmente, hay 73 femeninos en la provincia, diez más que la temporada pasada. Cuatro de ellos son en categoría sénior, pero el resto son en el fútbol base, donde la Federación Catalana de Fútbol ha puesto el foco. Su delegado provincial en Lleida, Josep Maria Espasa, recalca que “cuánto más amplia sea la pirámide de la base, será más positivo. Nuestro objetivo es ayudar a los clubes a potenciar las categorías de promoción para que sigan creciendo poco a poco y los equipos punteros puedan disfrutar de mejores jugadoras en un futuro”.

Ahora mismo, la punta de lanza del fútbol femenino leridano es el AEM, ya que es el único representante en las categorías estatales, con el primer equipo, que cumple su undécima temporada en la categoría de plata del fútbol español, y con el filial, recién ascendido a Tercera RFEF. Por detrás quedan 19 equipos alevines, 15 infantiles, 2 cadetes, 12 juveniles y otros 23 séniors, distribuidos entre fútbol-11 (9) y fútbol-7 (14).

De hecho, esta última modalidad es exclusiva del fútbol femenino y ofrece “una oportunidad de que muchas chicas puedan seguir disfrutando del deporte y que se creen equipos en municipios más pequeños”, concluye Espasa.

Andrea Gómez, la primera leridana profesional del deporte rey

Andrea Gómez (14-5-2003) ha cumplido el sueño de muchas niñas al convertirse en la primera jugadora leridana en ser oficialmente profesional. Pese a que en 2005, Dolors Ribalta, de Agramunt, jugó la Champions con el Espanyol y las jóvenes Ona Baradad y Alba Caño, de Rosselló y Puiggròs, respectivamente, han debutado en el Barça que lo está ganando todo, Gómez es la primera leridana que tiene ficha en un equipo de la Liga F, competición profesional desde hace dos años.Andrea Gómez dejó el AEM este verano para firmar por el Granada, tras su ascenso a la máxima categoría con el también leridano Roger Lamesa en el banquillo, y ella misma se sorprendía de su condición como única profesional. “La verdad es que no lo sabía, pero es un orgullo”, reconoce Gómez, autora del primer gol del Granada en su regreso a la élite. La leridana, de 20 años, afronta esta nueva etapa “con ganas de disfrutar y de momento lo estoy haciendo mucho”. Precisamente, esto va a marcar su trayectoria en el fútbol profesional. “Evidentemente que sueño con vivir de esto muchos años, pero mi objetivo es seguir pasándomelo bien sobre el campo. Si no, nada tiene sentido”, apunta.Gómez ha conseguido algo a lo que muchas otras se han visto obligadas a renunciar. Una de ellas es Iris Aixalà, que tuvo que retirarse en verano con 25 años por incompatibilidad con el trabajo cuando era la capitana del AEM. “Había días en los que iba a entrenar casi sin comer, directa desde el trabajo, hasta que cambié de empresa y no podía ni ir a entrenar. Era un esfuerzo inasumible”, relata Aixalà, que explica que ahora “vuelvo a disfrutar jugando con mis amigas en el Borges de fútbol sala” y lo combina con apariciones en la Queens League.