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EL DETALLE

Goleada para abrir el año

El Vila-sana vence con comodidad al colista Alcobendas en un duelo que tenía encarrilado a los 6 minutos (3-0)

Tripletes de Dai Silva y Luchi Agudo y también marcaron Gimena, Maria y Victòria Porta

Gimena Gómez intenta un llançament a porta, en una acció del matx disputat ahir contra l’Alcobendas.

Gimena Gómez intenta un lanzamiento a puerta, en una acción del partido disputado ayer ante el Alcobendas. - CLARA LIÁÑEZ

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El Vila-sana abrió ayer el año con una plácida goleada sobre el colista Alcobendas (9-1), que todavía no ha sumado ni un punto en la OK Liga Femenina y que nada pudo hacer para frenar el aluvión ofensivo que se le vino encima. Pudo ser incluso una goleada mayor, ya que las del Pla d’Urgell dominaron a placer desde el primer minuto y dispusieron de muchas ocasiones que, entre la buena actuación de la portera madrileña, Patricia Sanz, y la falta de acierto incluso en acciones aparentemente sencillas, dejaron el marcador final en 9-1. El de ayer fue el primer partido de los tres que debe afrontar el Vila-sana en un exigente inicio de año, ya que el miércoles tiene otro duelo de Liga en la pista del Cerdanyola y el domingo regresa a la Champions, con un partido clave en Lisboa, en la pista del Benfica.

El Vila-sana saltó a la pista con la determinación de sentenciar lo antes posible y ya tenía el encuentro encarrilado a los seis minutos, con un 3-0 que ya no se movería hasta la segunda parte.Sin el técnico Lluís Rodero en el banquillo, baja de última hora al sentirse indispuesto y sin Laura Barcons, el equipo leridano tardó poco más de un minuto en abrir el marcador. Dai Silva se hizo con una bola que había quedado suelta en el área para marcar el 1-0 (1’). Dueño absoluto del partido, siguió el juego de ataque ante un rival al que le costaba salir de su propia pista y que apenas se acercaba a la portería de Anna Salvat. A los tres minutos Luchi Agudo anotó el 2-0 y, en el minuto 6, Victòria Porta ponía el 3-0 en el marcador.El equipo aflojó entonces el ritmo, dio un respiro al Alcobendas, que pudo controlar un poco más la bola, pero que tampoco era capaz de crear peligro, con lo que el encuentro pasó a ser un dejar correr el tiempo, aunque desde el banquillo, Albert Arnau, técnico ayer, exigía más intensidad. Con el 3-0 se llegó al descanso.El inicio de la segunda parte volvió a ser un calco del de la primera, con un Vila-sana que había recuperado la intendidad y que volvió a agobiar la portería de Patricia Sanz, que evitó un marcador más abultado. En el primer minuto de la reanudación Victòria Porta asistió a Maria Porta para que anotara el 4-0 (26’) y, en el 27, Gimena Gómez erró un penalti. El 5-0 lo firmó Luchi Agudo en el minuto 30 y, en el 39, Dai Silva ponía el 6-0 en el marcador. Ambas argentinas acabaron el partido firmando sendos hat-tricks.En el minuto 40 Silvia Herrero acortó distancias (6-1), pero el Vila-sana siguió apretando el acelerador para amplair la diferencia y encadenó tres goles más: Dai Silva hizo el 7-1 (42’), Gimena Gómez el 8-1 (45’) y Luchi Agudo cerró el marcador con el 9-1 (48’). Tras esta victoria y el resto de resultados, el equipo sigue tercero con Palau de Plegamans y Gijón colíderes.

Albert Arnau, entrenador ayer del Vila-sana por la ausencia de Lluís Rodero, que estaba indispuesto, celebró la victoria pero también las “buenas sensaciones” en el primer partido del año y admitió que había pedido a las jugadoras que sentenciaran lo antes posible y que jugaran con intensidad. “Hemos entrado muy bien en el partido y hemos jugado con intensidad desde el primer minuto lo que nos ha permitido marcar muy pronto”, explicó Arnau.

Valoró que “en algún momento de la primera parte hemos estado relajadas a ratos, dejando pasar el tiempo, pero en la segunda parte hemos entrado otra vez bien. Nos ha faltado definición, porque el resultado podía haber sido incluso mucho más amplio”, añadió.“Los puntos eran muy importante, pero también coger buenas sensaciones en el primer partido del año y eso también lo hemos conseguido”. Dijo que “el mensaje previo era que teníamos que salir a sentenciar el partido lo más pronto posible y que no se nos hiciera más largo de la cuenta”.Tras el parón, el equipo tiene que afrontar tres partidos en ocho días, ya que, al de ayer, se le suma otro de Liga el miércoles en Cerdanyola y el domingo el debut esta temporada en la Champions, en la pista del Benfica de Lisboa. “Si, es una semana exigente, de ahí la importancia de tener buenas sensaciones en el primer partido del año. Ahora toca pensar en Cerdanyola y ya pensaremos después en el Benfica”, concluyó.

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