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EDUCACIÓN UNIVERSIDAD

Sin test físicos para Inefc

Sus centros suprimen las pruebas atléticas para acceder a sus estudios el próximo curso y solo contará la nota de corte

Uno de los motivos es facilitar que haya una mayor presencia femenina

Un grup d’aspirants a cursar estudis d’Inefc l’any passat durant les proves físiques.

Un grupo de aspirantes a cursar estudios de Inefc el pasado año durante las pruebas físicas. - RAMON TORRALBA SANS

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Lleida

El Inefc ha suprimido para el próximo curso 2024-25 las Pruebas Físicas o Pruebas de Aptitud Personal (PAP) para acceder al grado de Ciencias del Deporte, después de haberlas recuperado este curso tras cuatro años sin hacerlas debido a las restricciones que había por la pandemia. Además, desde 2014, estas pruebas que eran organizadas por el Inefc únicamente en los centros de Lleida y Barcelona, eran también válidas para acceder a otros como el último en ser inaugurado, Inefc Pirineus en La Seu d’Urgell, la UVic-Ucc o la UPF-Tecnocampus de Mataró. Es decir, un alumno admitido podía matricularse después en otro centro diferente del que hubiera hecho el examen de acceso.

Profesorado de los tres Inefc (Lleida, Pirineus y Barcelona) debatieron qué hacer desde 2022

Las Pruebas de Aptitud Personal (PAP) eran unas pruebas específicas de acceso que evaluaban la aptitud física de aquellos alumnos y alumnas que deseaban acceder al Grado en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte. Actualmente la gran mayoría de universidades ya habían acordado suprimirlas y centran únicamente las limitaciones de acceso mediante la oferta de plazas y, en función de la nota media del alumnado que desea acceder al grado universitario como así ocurrirá en Inefc.

Estos test físicos habían sido objeto de controversia en los últimos años, ya que estaban basadas en la hegemonía masculina. La fuerza y la potencia eran más protagonistas en estos exámenes que las capacidades físicas más propias de las mujeres como la coordinación rítmica o la flexibilidad, que no tenían presencia. 

Hubo, además, otro factor que ayudó a tomar la decisión de suprimir las pruebas físicas y es que la eliminación de estas en los tres años de pandemia y postpandemia coincidió con un incremento de las notas de corte y provocó un aumento del número de alumnas en el primer curso, llegando al 32% cuando solía ser de poco más de un 20%. De ahí que desde comienzos del curso 2022-23 profesorado de los tres centros en Catalunya (Inefc Lleida, Inefc Pirineus e Inefc Barcelona) participase en un intenso debate acerca de la conveniencia o no de hacer estos exámenes físicos. 

El director de Inefc Lleida, Xavier Peirau, dijo ayer al respecto que “en cierto modo, del proceso de reflexión que iniciamos el año pasado en la votación final ganó el hecho de no hacer las PAP, siguiendo la tendencia del resto de facultades en Catalunya. Uno de los motivos entre otros es estimular la participación de las mujeres en nuestros estudios”, concluyó.

Cuatro pruebas, de las que había que superar 3, y 2 eran obligatorias

Los y las aspirantes debían superar al menos tres de las cuatro pruebas físicas que se les proponía. La primera era la adaptación al medio acuático, donde tenían que completar un circuito nadando. La segunda era la carrera lanzadera, conocida también como Course Navette, donde se evaluaba su capacidad de resistencia. La tercera prueba consistía en el lanzamiento de una pelota medicinal y ejercitar la fuerza física en el tren superior. Finalmente, la cuarta era el salto horizontal, que mide la capacidad de salto del estudiante, es decir, su fuerza en el tren inferior. De las tres pruebas que al menos había que superar, dos necesariamente debían ser la del medio acuático y la de la carrera lanzadera.

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