Derrota dolorosa en casa

El Rodi Balàfia Vòlei cayó derrotado contundentemente ayer en casa ante un buen Zaragoza que fue superior durante todo el partido. Los leridanos sufrieron la lesión de su colocador Gerard Orteu, que se suma a la lesión de Alberto Cánovas.

A falta de cuatro jornadas para terminar la temporada, los de Sergi Mirada deberán medirse al líder Sant Pere i Sant Pau la semana próxima y les faltará jugar contra Ibiza y Xàtiva, segundo y tercero repectivamente, y el Barça, rival directo en la lucha por la salvación.El partido empezó tal y como se esperaba, con un Zaragoza que se distanció rápidamente en el marcador (4-10). El Balàfia, nervioso, acumuló muchos errores no forzados hasta perder el primer parcial (16-25).En el segundo set, el Zaragoza se confió y las fuerzas se igualaron (10-10). Sin embargo, la reacción local se disipó y los visitantes se llevaron sin complicaciones un parcial en el que debutó el juvenil Dídac Nerín (19-25). El tercer y último set fue el más igualado, ya que los visitantes usaron a varios suplentes, pero en los momentos finales a los leridanos les falló la precisión y los aragoneses se llevaron el partido (21-25).Durante las pausas entre parciales, el grupo de baile de Down Lleida animó a todo el pabellón con diferentes coreografías.Tras el partido, el entrenador del Balàfia Vòlei, Sergi Mirada, reconoció que “no estuvimos muy acertados en recepción y nos faltó un recambio para Bernat, ya que notamos que las bajas hacen que se nos acumule más el cansancio físico y mental”. Mirada tiene claro que “debemos ganar, con suerte, un partido para salvarnos, pero debemos creer que podemos ganar a Xátiva e Ibiza en casa”.