FÚTBOL FEDERACIONES
Investigan si Soteras falsificó 26 actas de votación de clubes de Lleida
En las elecciones de la Catalana de Fútbol
El juez investiga 171 en Catalunya
Una agente de los Mossos, el martes durante el registro efectuado en la sede de la Federación Catalana. - EFE/ALEJANDRO GARCÍA
El juzgado número 2 de Sabadell que investiga si el presidente de la Federación Catalana de Fútbol (FCF), Joan Soteras, falsificó actas del voto delegado en las elecciones tendría bajo sospecha a 26 procedentes de clubes de fútbol y fútbol sala de Lleida, de un total de 171 de toda Catalunya, según ha podido saber este diario de fuentes próximas a la investigación.
El juez sospecha que Soteras se sirvió supuestamente de los requisitos impuestos por el Tribunal Català de l’Esport por los cuales el presidente o el vicepresidente de un club podía autorizar a otra persona, mediante un poder notarial, a votar en su nombre. Para eso, hacía falta acreditar mediante un certificado ante notario que el presidente del club efectivamente lo era. La investigación, según desveló La Vanguardia, habría obtenido indicios que apuntarían que Soteras habría hecho servir los datos personales de los presidentes de los clubes que constan en la base de datos de la FCF para hacer el certificado del club y solicitar el poder notarial para autorizarse a él mismo el poder para votar por su candidatura. En total, se obtuvieron 171 actas por este método en las pasadas elecciones a la Federación Catalana, todas ellas firmadas ante un notario de Sabadell y con números correlativos, detalle que indicaría que se habrían firmado una detrás de otra. También se investiga la participación de algunos altos cargos del ente federativo en la presunta falsificación de documentos y la vinculación del notario de Sabadell con el presunto fraude. Cabe recordar que Joan Soteras es de Sabadell y presidió el club de la ciudad.
Durante meses, según La Vanguardia, los Mossos se dedicaron a visitar a los presidentes de los 171 clubes que delegaron el voto a Soteras para confirmar si la firma que figuraba era la suya. Y hubo casos en los que los presidentes negaron que hubiesen suscrito nada y afirmaron que les habían falsificado la firma. Este diario pudo saber que habría más actas en Lleida hechas del mismo modo, pero que no llegaron a entregarse a los clubes.
