FÚTBOL SEGUNDA RFEF
El Lleida ofrece la renovación al defensa Neyder Lozano
Ante su grave lesión de ligamento cruzado que le obligará a pasar por el quirófano
El Lleida Esportiu ha ofrecido la renovación, por una temporada más, al defensa Neyder Lozano tras lesionarse de gravedad el pasado domingo durante el partido ante la Penya Independent. La temporada se ha acabado para el colombiano debido a que sufre la rotura del ligamento cruzado anterior y del menisco externo. Una vez practicadas todas las pruebas médicas, tendrá que pasar por el quirófano.
Se trata de un nuevo capítulo amargo en el calvario de lesiones graves que ha sufrido Neyder en los últimos años. De ahí que escribiera el martes en su cuenta de Instagram: “Nuevamente nos toca tener una batalla difícil, (...), y digo nos toca porque no solo es una batalla que nuevamente me toca vivir a mí, a mi familia y también a todas aquellas personas que me quieren y que estarán conmigo luchando para superar esto y volver más fuerte que nunca”.Neyder Lozano, que en marzo cumplió 30 años, representa todo un ejemplo de superación. Llegó libre en verano al Lleida tras haber acabado la temporada pasada en el Talavera de la Reina, colista del grupo 1 de Primera RFEF y en la primera mitad de la campaña había militado en el Lugo, de Segunda división, donde se reencontró con el fútbol después de tres años sin jugar por las lesiones. El colombiano, que empezó a labrarse su futuro en el San Sebastián de los Reyes, pasó al fútbol profesional con el Elche, con quien ascendió a Segunda en 2018. En el curso 2018-19, disputó 29 partidos con los ilicitanos y dio el salto a Primera con el Granada en 2019, pero no llegó a debutar con los andaluces por una lesión de tibia que le obligó a pasar por el quirófano hasta en cuatro ocasiones. La cuarta intervención fue para tratar de acabar con una rara y poco habitual infección que apareció en la zona afectada.En Granada destacan que, pese a que las dos últimas campañas ni siquiera tuvo ficha federativa, siempre fue un miembro más del vestuario nazarí, valorado y respetado tanto por sus compañeros como por Diego Martínez y Robert Moreno, los técnicos que tuvo el equipo en ese tiempo. En Lleida también se ha ganado el cariño de la afición y del vestuario por su calidad humana.