YECLA
Triste final del Lleida Esportiu, que pone fin a la temporada con una eliminatoria decepcionante contra el Yeclano
El Lleida pone fin a su temporada con otra decepcionante derrota ante el Yeclano, que volvió a dominar con su juego y fue justo vencedor
Dos goles en el tramo final de Olmedo sentenciaron un cruce que el conjunto murciano ya afrontaba con ventaja de la ida
El Lleida puso ayer fin a una temporada en la que devolvió la ilusión a gran parte de la afición azul con una primera vuelta de Liga brillante y un gran nivel de juego que permitía soñar con un ascenso que tantos años lleva esperando, pero que fue desvaneciéndose poco a poco, paso a paso, hasta culminar en un triste final en la primera ronda de play off ante el Yeclano, en el que le condenaron los mismos errores que en la ida.
El conjunto azul afrontaba la operación remontada después de caer por 0-1 en casa en un partido manchado y suspendido por el lanzamiento de objetos al terreno de juego. Pero el plan para levantar la eliminatoria se quedó en eso, en un plan, que no estuvo cerca de cumplirse en casi ningún momento del partido, ya que el Lleida casi ni remató a puerta y se mantuvo con vida hasta el final, como lo hizo para conseguir el ascenso directo en la Liga regular, pero como entonces recibió un golpe definitivo de la mano de Olmedo, que marcó dos goles en los últimos diez minutos (2-0) para acabar con una temporada en la que escribió un camino bonito que, como le ha pasado tantas veces en los últimos años, no pudo culminar.
Desde un inicio, el partido fue la continuación que no se produjo en el Camp d’Esports, pese a que Viadero rompió su cñasico 5-3-2 para cambiar la formación a un 4-4-2. El Yeclano jugó siempre a lo que quiso, ante un Lleida que no encontraba la manera de generar peligro ni supo bajar al barro como debía ante un rival que ya lo hizo de maravilla en la ida y lo bordó en su feudo, con una afición que lo llevaba en volandas.
Los 20 primeros minutos fueron de tanteo, con un Lleida que monopolizaba la posesión pero no generaba peligro. El conjunto murciano esperaba agazapado cerca de su área, a sabiendas de que cuando llegara su primera ocasión, llegarían otras muchas.
Y así fue como un balón largo acabó en los pies de un Pedrosa que se plantó solo en el área en conducción y obligó a intervernir por primera vez a Iñaki.
El tiro llegó en el minuto 18 y fue el inicio de un tramo de absoluto asedio local, en el que el Lleida solo fue capaz de resistir. En el córner posterior, Naranjo reclamó un penalti y, ja continuación, volvió a probar a Iñaki con un tiro desde la frontal. Después de Naranjo, quien apareció fue un Salinas que primero intentó sorprender con una falta lateral que el meta leridano sacó de la escuadra y después volvió a intentarlo desde lejos sin acierto.
Por si no fuera poca la desgracia azul, en una de las pocas faltas laterales que pudo colgar, en el 29, Montero se lesionó en el tobillo y tuvo que ser sustituido. El parón por su cambio no sirvió para cortar la sangría y el Yeclano se mantuvo fiel a su idea, ganando todos los balones divididos, con lo que conseguía plantarse con facilidad en la frontal del área y remataba cada vez que tenía la posibilidad, obligando a intervenir otra vez a Iñaki tras otro tiro de Salinas.
Por suerte para el Lleida, se llegó al descanso sin movimiento en el marcador y el conjunto azul salió de los vestuarios con una mayor intensidad para imponerse en algunos de los constantes balones divididos. Además, nada más arrancar Chuli hizo el primer tiro a puerta leridano del partido, aunque no puso en ninguna complicación al portero local Zarco.
Sin embargo, tras solo tres minutos, el Yeclano volvió a acercarse con mucho peligro, con un tiro peligrosísimo de Pedrosa que Iñaki sacó con una fantástica mano abajo cuando ya se cantaba un gol que parecía cuestión de tiempo, como al final pasó. La necesidad que tenía el Lleida de marcar no se tradujo ni mucho menos en la creación de ocasiones. De hecho, la única del bando leridano en todo el partido fue un centro de Cortijo que Ton Ripoll remató de cabeza muy cerca del larguero de un Zarco que solo tuvo que intervenir en centros.
El conjunto leridano supo contener mejor las salidas al espacio locales y tuvo el control de la posesión, casi siempre estéril. La esperanza leridana se iba desvaneciendo con el paso de los minutos y acabó completamente por los suelos en el minuto 80. Bakero y Cortijo no se entendieron para sacar un balón jugado desde atrás y Serpeta lo recuperó en el sector derecho. El atacante puso un balón tocado a la espalda de la defensa para la entrada desde muy atrás del carrilero Olmedo, que controló y fusiló a Iñaki en el primer palo para desatar la locura en La Constitución y poner el primer clavo en el ataúd de la temporada del Lleida (1-0).
Él mismo se encargó de colocar el segundo, ya que en el 89 convirtió un penalti cometido por Quadri (2-0) que puso el 3-0 en el global de una eliminatoria que el Lleida no estuvo nunca cerca de ganar.
Todos los equipos del grupo 3, eliminados
Además del Lleida, los otros tres equipos del grupo 3 que disputaron el play off cayeron también ayer. El primero fue el Europa, que no pudo remontar el 2-0 de la ida y cayó también en casa (1-3). El Badalona Futur tampoco pudo levantar el 1-0 desfavorable y empató a cero ante el Orihuela en Vic. Quien estuvo cerca más cerca de pasar fue el Sant Andreu, que ganó por 2-0 en casa y ayer perdió por el mismo resultado en Zamora (2-0) y, tras la prórroga, quedó eliminado por su peor clasificación.
Record de veteranía de Òscar Rubio
El leridano Òscar Rubio se convirtió ayer en el segundo jugador de toda la historia del Lleida en vestir la camiseta azul con 40 años de edad, que cumplió el pasado martes. El único precendente fue en la temporada 1943-44, cuando lo hizo Pepe Luis Zabala, quien entonces era el entrenador del equipo pero jugó un partido como futbolista, cuando tenía 44 años, en el campo del Atlètic Balears. Así, Rubio se convierte en el primero que logra dicho hito siendo únicamente jugador.