PALAU-SOLITÀ I PLEGAMANS
Amarga despedida del Vila-sana
El Vila-sana dice adiós a la temporada con una derrota en la pista del Palau de Plegamans que le elimina del play off por el título
El gol de las del Pla d'Urgell, de Victòria Porta de penalti, llegó a menos de tres minutos del final, sin tiempo para forzar la prórroga
Las lágrimas volvieron a derramarse ayer por los rostros de las jugadoras del Vila-sana. Una vez más, no lograron cambiarlas por la sonrisa que acompaña a las ganadoras. El equipo vivió una amarga despedida de la temporada, tras sufrir una derrota por 2-1 en la pista del Palau de Plegamans. En el partido decisivo de semifinales, tras una victoria para cada equipo en los dos encuentros previos, la victoria cayó de nuevo del lado del conjunto barcelonés, que será el que disputará el título de campeón de Liga con el Fraga, clasificado por la vía rápida tras eliminar al Telecable Gijón.
El Vila-sana buscaba una victoria que le diera la oportunidad de luchar por el título, pero su primer trofeo deberá esperar una vez más. Esta temporada se ha quedado a las puertas de los cuatro títulos. Las semifinales han sido su techo en la Supercopa, la Copa y la Liga, aunque sí pudieron clasificarse, por segundo año consecutivo, para la final de la Champions. Salvo ayer, en las otras tres competiciones se vieron apartadas del triunfo por los penaltis.El partido, tal como se esperaba, fue intenso. El técnico del Vila-sana, Lluís Rodero, había pedido a sus jugadoras intensidad y concentración, y se aplicaron a ello desde el primer segundo. El resultado fue continuas llegadas a ambas porterías, aunque las defensas y las porteras se imponían, impidiendo que las jugadas de ataque se transformaran en goles.
Rodero había destacado en la previa que una de las claves del partido estaría en adelantarse en el marcador y quien lo consiguió fue el Palau de Plegamans. A los ocho minutos de partido, tras una gran ocasión del Vila-sana para marcar, el equipo local lanzó una rápida contra que culminó con el 1-0 marcado por Anna Casaramona. Tocaba remar contracorriente, lo más incómodo en un partido tan equilibrado y entre rivales de gran nivel y que se conocen hasta el último detalle.Ambos equipos mantuvieron el rigor defensivo, con un Palau de Plegamans poco dispuesto a correr riesgos y un Vila-sana obligado a marcar. No lo consiguió y la primera parte finalizó con 1-0.Poco cambiaron las cosas en el inicio del segundo acto.
Rodero movía el banquillo buscando sorprender a su rival, pero tanto la defensa local como la portera Laura Vicente, seguían infranqueables. El Palau de Plegamans tampoco conseguía ampliar la diferencia, con lo que el final seguía siendo imprevisible. Pero había que marcar, y las leridanas seguían sin acierto en sus acciones ofensivas. Como muestra, la ocasión de que dispuso Victòria Porta en el minuto 34, que tampoco encontró el premio del gol.Y como en el primer tiempo, tras una excelente ocasión para las leridanas, llegó el jarro de agua fría. En el minuto 35, una confusa jugada de ataque local finalizó con un rebote que llegó al stick de Aina Florenza que, en un lateral de la portería, anotó el 2-0.
Este gol sí que afectó a las jugadoras del Vila-sana, para las que el marcador ya suponía una pesada losa. Además, el Palau de Plegamans, viendo a su rival ‘tocado’, se lanzó en busca de la sentencia. Dispuso de buenas ocasines, pero Sandra Coelho las desbarató. La mejor la tuvo Aimee Blackman que, centrada ante la meta leridana, lanzó un duro remate que salió ligeramente alto (40’).El partido entró así en los diez últimos minutos y el tiempo ya jugaba en contra del Vila-sana. El Palau de Plegamans apostaba por posesiones largas, forzando el tiempo de posesión, mientras que la buscada rapidez de las leridanas degeneraba en ocasiones en precipitación y pérdidas de bola.
Llegó entonces una acción clave en el minuto 46. Victòria Porta cometió la décima falta y Aina Florenza se dispuso a lanzar la directa y sentenciar. Rodero hizo salir entonces a Anna Salvat, que salvó el gol.Del 2-0 se pasó al 2-1. En la jugada siguiente los árbitros señalaron penalti a favor del Vila-sana y Victòria Porta lo transformó en gol (2-1, 47’). Aunque quedaba poco tiempo, el Vila-sana se lanzó a un ataque absoluto que incluyó, en el último minuto, sacrificar a la portera y jugar con cinco de pista. No salió bien y el final del partido suposo también el final de temporada para el Vila-sana. Después, las jugadoras de ambos equipos hicieron un pasillo de honor a Laura Barcons, que no pudo evitar las lágrimas en el último partido de su carrera.
Rodero: “Nos hemos quedado a las puertas de los cuatro títulos”
Lluís Rodero estaba triste al final del partido y lamentaba que “como siempre, el partido se nos ha ido en los detalles” y, tras el partido que cierra el curso, señalaba que “no ha sido una mala temporada y el que diga lo contrario no nos está juzgando bien. Nos hemos quedado a las puertas de los cuatro títulos y en tres de ellos ha sido por penaltis”, explicaba.
En cuanto al partido de ayer señaló que “justo después de una ocasión en la que nos hemos podido adelantar, ellas han marcado el 1-0 en una contra. El 2-0 llega de rebote.. no hemos hecho un mal partido, aunque sí que nos ha faltado continuidad”.El técnico añadió que “no hemos tenido suerte en los rebotes, tanto en ataque como en defensa han ido siempre para ellas. Y aunque hemos tenido intensidad hasta el final, el 2-1 ha llegado demasiado tarde, sin tiempo para reaccionar”. Se quejó también de que “el arbitraje, sin ser decisivo, sí que en cada acción en que ha tenido dudas, la ha acabado señalando a su favor, dejándose influenciar por la grada”.