La foto de la renovación del Lleida CF: las bajas

Es una fotografía curiosa, aunque sea la tónica habituales de los equipos de fútbol afincados en divisiones inferiores como la Segunda B, o la actual RFEF, donde vive el Lleida CF desde hace años. La marcha y venida de jugadores, y la renovación prácticamente total de las plantillas es una práctica habitual en clubs a menudo justos de presupuesto y con contratos que duran, en el mejor de los casos, uno o dos años.

Los jugadores que hacen buena campaña se marchan en busca de mejores condiciones, y a los que les ha ido peor no tienen sitio en el equipo de la próxima temporada. Hay casos dolorosos para la afición, como el adiós de Chuli, delantero que se va convertido en alma del equipo, a pesar de una segunda vuelta más que justa, y que marcó 18 goles en dos temporadas.

La fotografía que ilustra esta noticia, y que es el poster del Lleida Esportiu -ahora Lleida CF- que regaló SEGRE el marzo pasado, explica la renovación que tienen todos estos equipos. De la plantilla que el año pasado alcanzó el play-off y luchó hasta la última jornada por el ascenso directo sólo quedan, hasta nueva orden, seis jugadores de campo y tres porteros.

Seis jugadores de campo y tres porteros

Los de campo son Campins, Musa, Lozano, Cortijo, Rubio y Quadri. Este último con un puñado de propuestas encima de la mesa que el club ya ha anunciado que, o pagan la cláusula o el prodigioso mediocampista jugará otro año al templo azul. De los porteros, al menos Iñaki Álvarez y Lladonosa siguen, mientras que el portero Satoca está por decidir su futuro.

La lista se bajas es larga. Ripoll, Figueras, Bakero, Robles, Mateo, Combes, Vigario, Montero, Chuli, Agüero, Becerra, Soto y Rossi.

En la fotografía aparecen en rojo el antiguo director general, Vicente Javaloles, que dejó la entidad al principio de año, y el entrenador Ángel Viadero, que dejará paso al nuevo entrenador Marc García.